Armand Llàcer: "El cierre preventivo de la Sala Repvblicca por parte del Ayuntamiento de Mislata es muy caprichoso a ojos del sector"
El consistorio explica que, según su licencia de actividad actual, el local tiene un aforo máximo de 429 personas y asegura que está tramitando la documentación para desprecintarlo
Armand Llàcer: "El cierre preventivo de la Sala Repvbblica por parte del Ayuntamiento de Mislata es muy caprichoso a ojos del sector"
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València
La noticia saltaba el pasado viernes con el "cierre preventivo", así lo justificó el Ayuntamiento de Mislata en un comunicado, de la Sala Repvblicca, que obligó a cancelar el concierto que The Tyets y Julieta iban a ofrecer esa noche con 1.300 personas.
La orden de precintar el local fue tomada, según la versión del consistorio, como una "medida cautelar" por la presunta actuación irregular de los propietarios, que habrían vendido un número de entradas superior al del aforo permitido, que cifra en poco más de 400 personas.
Y es que, tal y como han explicado fuentes municipales a la Cadena SER, este aforo, tan reducido en comparación con la capacidad real de la sala, está calculado en base a su licencia de actividad actual, concedida hace ahora dos décadas, que concibe el espacio como un salón de baile con mesas.
Precisamente esa es la crítica que ha hecho Armand Llàcer, portavoz de la Federación Valenciana de la Industria Musical (Fevim), en Hoy por Hoy Valencia: "La Sala Repvblicca sigue considerada, a instancias del ayuntamiento, como un salón de baile con mesas y una disposición que discrepa por completo de la Ley de Espectáculos, que fue refundada en 2022 y por la que pasó a ser un lugar de conciertos, donde el aforo que suele mandar es muy superior al de 429 personas".
Un cierre "caprichoso"
El conflicto, pues, radica en el hecho de que los dueños del local respetan la capacidad de público que figura en una OCA, una certificación llevada a cabo por un organismo privado autorizado y avalado por la Generalitat Valenciana, que sitúa el máximo aforo posible en las 1.700 personas, "vendiendo unas 1.200 o 1.300 entradas cada fin de semana".
Por ello, Llàcer ha calificado el cierre forzoso, "de un día para otro", como "muy caprichoso a ojos del sector, teniendo en cuenta que se había presentado toda la documentación requerida".
"Pensamos que el cierre no se ha hecho en tiempo y forma. Desde el propio sector solicitamos una reunión urgente con el Ayuntamiento de Mistala y estamos a la espera de que nos contesten y ver de qué manera podemos solucionar el problema, porque se trata de uno de los lugares más emblemáticos tanto de la Comunitat Valencia como del resto de España, donde actúan bandas internacionales, y nuestro interés es hacerla funcionar cuanto antes", ha añadido.
En este sentido, las fuentes municipales consultadas por Radio Valencia señalan que "se está tramitando la documentación para resolver la situación a la mayor brevedad posible", aunque desconocen si podrá ser esta misma semana, poniendo en jaque a la programación musical que estaba prevista para los próximos días.
