Manises y Xirivella presentan alegaciones contra el nuevo plan de ruido del aeropuerto de València
Ambos municipios siguen estrategias similares y creen que deben aplicarse medidas efectivas para eliminar los perjuicios que causa el ruido al vecindario
Vista aérea del aeropuerto de València, en Manises. / Blom
València
Este viernes ha terminado el plazo para presentar alegaciones al nuevo plan de ruido del aeropuerto de València que prepara Aena. Un plan que aumenta el número de viviendas afectadas por la huella acústica, entre otras cosas, pero que no convence a los municipios más afectados. Tanto Manises, donde se ubica el aeropuerto, como Xirivella, el municipio más afectado por la huella acústica, han presentado alegaciones y piden al Ministerio de Transportes que les escuche.
En Xirivella, casi la mitad de los edificios de la localidad están afectados por la huella acústica (unas 6.400 viviendas), pero el Gobierno local denuncia que en los últimos meses se ha incrementado el volumen de tráfico aéreo, por lo que la huella acústica debe incluir a todas las viviendas. El concejal de Urbanismo, Guillermo Garrido, avanza que también van a exigir a Aena compensaciones por las molestias ocasionadas por el ruido de los aviones. Explica que la insonorización de las viviendas no es la solución, ya que en verano las ventanas están abiertas, y reclama más medidas.
Guillermo Garrido (concejal de Urbanismo de Xirivella) avanza que también van a exigir a la empresa pública que gestiona los aeropuertos en España compensaciones por "las molestias ocasionadas por el ruido de los aviones"
"Las mediciones de Aena no reflejan la realidad"
Garrido insiste en que "las mediciones de Aena no reflejan la realidad" y que los datos con los que ha elaborado el plan de ruido están "distorsionados a la baja". El Ayuntamiento de Xirivella ya aprobó una moción en la que se oponía a la ampliación de este aeropuerto y pide al ministro Óscar Puente que visite Xirivella y conozca de primera mano el ruido constante que soporta el municipio.
Guillermo Garrido (concejal de Urbanismo de Xirivella) le pide al ministro Óscar Puente que visite Xirivella para conocer "el ruido constante que soporta el municipio"
Manises también presenta alegaciones
El Ayuntamiento de Manises, por su parte, sigue la estela del de Xirivella y también ha presentado alegaciones al nuevo plan de ruido para el Aeropuerto de València. En concreto, el consistorio solicita quince medidas para eliminar los perjuicios causados a los vecinos y vecinas del municipio. De entre todas las exigencias, la más importante pasa por suprimir de forma total la fuente del ruido.
El alcalde de Manises, Javier Mansilla, explica en declaraciones a la Cadena SER que esto se consigue mediante el traslado del aeropuerto a una ubicación alejada (entre 20 y 60 kilómetros) de los núcleos de población. Y, sobre la ampliación del aeropuerto, Mansilla se opone: exige que se paralicen las inversiones destinadas a este aeródromo, ya que supondrían un aumento del número de vuelos y, en consecuencia, generaría más molestias por ruido.
Javier Mansilla (alcalde de Manises): "Queremos que se elimine la fuente de ruido"
Así es el plan
El Ministerio de Transportes explicó el pasado mes de junio que el PAR del Aeropuerto de Valencia corresponde al Mapa Estratégico del Ruido, Fase IV, aprobado en diciembre de 2022, y constituye "una hoja de ruta con actuaciones definidas y un calendario de actuación para su implantación, tras el análisis y diagnóstico de la situación".
Todas las actuaciones previstas en el PAR han sido analizadas por las diversas entidades participantes en este Plan: Enaire, proveedores de servicio de torre, Aena, y Dirección General de Aviación Civil. AESA actuará como supervisor de todas estas medidas. Las líneas de actuación incluyen la reducción del ruido en la fuente con medidas como analizar posibles mecanismos para incentivar la sustitución de las aeronaves más ruidosas por otras de menor impacto acústico, especialmente en horario nocturno.
Asimismo, incluyen procedimientos operativos entre los que se contempla mejoras en procedimientos operacionales relacionados con las trayectorias de los aviones, la altura en los sobrevuelos y las configuraciones preferentes en aterrizajes y despegues con criterios de minimización del impacto acústico.
De igual modo se recoge la planificación y gestión de usos de suelo. En este caso, el Aeropuerto de Valencia cuenta con una Servidumbre Aeronáutica Acústica aprobada por el Real Decreto 54/2018, de 2 de febrero, que ofrece mecanismos legales a las administraciones competentes en ordenación del territorio para desarrollar un "urbanismo compatible" con el desarrollo aeroportuario en Valencia.
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