"Los que vivimos en el pueblo todo el año somos quienes más lo sufrimos": los municipios del Alto Palancia viven sus primeros días con restricciones en el uso del agua por la sequía

Castellón

Desde la pasada semana, municipios del Alto Palancia como Torás, El Toro o Barracas han tomado medidas unilaterales para reforzar las restricciones del consumo de agua debido a la situación de sequía y de aumento de población debido al verano.

En el caso de Torás, su alcalde Carlos del Río, explicaba esta mañana en declaraciones a Hoy por Hoy Castellón que el nivel de su acuífero se encuentra a la mitad y hace hincapié en que se trata, principalmente, de un problema de futuro. Los vecinos permanentes de Torás y los agricultores de la zona, los principales afectados por la escasez hídrica. "El problema se queda luego con nosotros, con los que vivimos en el pueblo todo el año. Sobre todo, si no se producen lluvias ni nieve durante el otoño. La verdad es que lo vamos a pasar mal", explica del Río.

Los tres consistorios han pedido a sus vecinos que "hagan un uso responsable del agua". Queda prohibido el lavado de vehículos, el riego de jardines y el llenado o reposición de agua de las piscinas de cualquier tipo.

Incendio de Bejís como punto de inflexión

Por parte de los ayuntamientos, ya se ha dejado de regar parques y jardines y se ha suprimido el llenado de las piscinas municipales. Además, "se va a proceder a cerrar las fuentes municipales". Del Río explica que el incendio de Bejís, del que se cumplen ya dos años, fue un punto de inflexión en la gestión de las reservas hídricas de la población. "Desde que sufrimos el incendio en 2022 se consumió una gran cantidad de agua para sofocarlo. No hemos pedido ayuda a nadie, porque sabemos que hay pueblos que están mucho peor que nosotros, sin gota de agua", comenta en declaraciones a esta emisora el primer edil de Torás.

Barracas, con el ojo en la hostelería

En este tipo de municipios, la población de verano se llega a multiplicar hasta por 4, y durante las fiestas hasta por 10. El consumo de agua humano no corre peligro, según explican los ayuntamientos, aunque sí afecta a servicios como el de la hostelería, que incrementan su clientela en estos meses. El alcalde de Barracas, Antonio Salvador, comenta en declaraciones a Radio Castellón que "tenemos muchos comercios y restaurantes en la zona del área de servicio de la autovía, donde hay mucho turismo, gente de paso y que hace que el consumo se incremente un poco más".