Chiva y Paiporta, en vilo ante la llegada de una nueva DANA: "Llueve sobre mojado"

València

Quince días después de la riada que acabó con la vida de 216 personas y arrasó numerosos municipios de la Plana d'Utiel, la Ribera y l'Horta Sud, la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) volvió a decretar el nivel rojo por alerta máxima ante la llegada de un nuevo episodio lluvias torrenciales al litoral norte y sur de la provincia de Valencia.

Ocurrió en la tarde del pasado miércoles y fueron hasta tres las alertas de protección civil que sonaron en los dispositivos móviles de los ciudadanos. En ellas se restringió el tráfico del vehículo privado, se anunció la suspensión de la actividad educativa, deportiva y de centros de día y hasta se recomendó permanecer en las zonas altas de las viviendas.

La aproximación de una nueva DANA, con una probabilidad de precipitación acumulada de hasta 180 litros por metro cuadrado en apenas 12 horas, y la proximidad en el tiempo de las inundaciones del 29 de octubre generaron una situación de pánico y prudencia entre la población, especialmente en las localidades que todavía siguen limpiando el barro de sus calles y casas.

"Llueve sobre mojado"

Es el caso de Chiva, donde a lo largo de la madrugada han caído 88,4 litros por metro cuadrado. "No ha dejado de llover en toda la noche, y a una intensidad bastante razonable, pero la lluvia no nos ha dejado, afortunadamente, incidencias graves". De esta manera celebraba Amparo Fort, su alcaldesa, que el transcurso del temporal haya sido menos intenso de lo esperado, aunque ha reconocido que "todavía tienen el miedo en el cuerpo" porque allí "llueve sobre mojado".

"La noche ha sido tranquila, dentro de la intranquilidad que se respira en Chiva", donde hay 130 viviendas desalojadas y donde los arquitectos revisan "aún con más cariño" las estructuras que se encuentran "en estado crítico". Un estado provocado por la enorme cantidad de agua que desbordó el barranco del Poyo hace dos semanas, provocando "muchísimos" daños en infraestructuras. "En el informe provisional que estamos elaborando, calculamos que la cifra asciende a los 50 millones de euros", ha indicado.

En Paiporta, donde fallecieron 45 personas, se asustaron "bastante". Así lo ha reconocido la primera edil, Maribel Albalat, en Hoy por Hoy Valencia. "Avisamos a la población según fueron llegando las alertas, sobre todo teniendo en cuenta que las alcantarillas están obstruidas por el barro y el riesgo de inundación era mayor, mientras que teníamos a los miembros de la Unidad Militar de Emergencias (UME) y los bomberos achicando agua allí donde se acumulaba".

"No tuvimos que cerrar ningún colegio ni cancelar ninguna actividad porque ni siquiera los hemos podido reabrir ni organizar". Tampoco existía peligro para los habitantes de las plantas bajas: "Tenemos a 35 familias en una situación de especial vulnerabilidad y el resto de afectados viven provisionalmente en casas de familiares o amigos. Aquí se inundó todo el pueblo y los bajos quedaron inservibles".

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