'Dins i Fora'- presos y prisiones de la posguerra (por Rafa Solaz)

València

Hoy nos encontramos junto a Rafael Solaz en La Nau de la Universitat de València, frente a la exposición 'Dins y Fora' que trata de los presos y las prisiones de posguerra, donde se pueden ver diferentes obras de la colección del mismísimo Rafael, y es él quien nos habla de una fecha concreta, el histórico sábado 1 de abril de 1939.

Se trata de uno de los episodios más trágicos acaecidos en la ciudad, el que forma parte de la Memoria Histórica en esa València Olvidada que es preciso recordar.

"En el día de hoy, cautivo y desarmado, el Ejército Rojo… ". El 1 de abril de 1939 se emitía en Burgos el archiconocido último parte de guerra que afirmaba el golpe militar que había comenzado en julio de 1936. Esa fue la proclama que titularon 'Día de la Victoria' sobre el ejército republicano. De nada había servido la constitución en Madrid del Consejo Nacional de Defensa, que se hizo cargo de la situación general de la zona republicana, sustituyendo al gobierno de Negrín como intento desesperado de salvar la debacle.

Tras la caída de Madrid, Barcelona, Tarragona y València, los periódicos en zonas franquistas anunciaban con grandes titulares el derrumbamiento de la Zona Roja y muchos dieron por acabada, momentáneamente, la llamada Cruzada Nacional contra el Marxismo.

Se tomaron medidas de urgencia. Entre los apresurados bandos de la autoridad militar se recordaba el de la incautación de bienes que incluían todo el material, edificios y efectos empleados por los rojos, que pasaría al nuevo Estado, con la advertencia de que sólo el Servicio de Recuperación del Ejército podría ejercer este cometido.

Por la tarde, desde la emisora de Unión Radio Valencia, se dedicaban alocuciones propagandísticas del cometido de la Sección Femenina y el Auxilio Social. Una voz exultante repetía: ¡Nace el Auxilio Social por el Imperio!, con consejos hacia los jóvenes y niños valencianos animándolos a que se alistaran en la Organización Juvenil Española. En este sentido, pronto la ciudad se llenaría de impresos propagandísticos exaltando la obra de la institución falangista.

El Gobernador Civil Planas de Tovar declaraba al recién constituido periódico “Avance”, que se había emocionado profundamente por la actitud ciudadana exponente de la enorme reacción producida por los desafueros de casi tres años de tiranía roja, realzando el incondicional y absoluto apoyo a la obra que dirigía Francisco Franco, el que fue proclamado como Caudillo de España por la Gracia de Dios.

A la incertidumbre y el temor que se estaba viviendo se añadía una preocupación más. Los billetes de curso legal de la República se anularon, ya no valían para la España de Franco, y los ciudadanos tenían que canjearlos en el Banco de España. Este canje de urgencia tan solo permitía cambiar cien pesetas por persona y se dieron treinta días de plazo a partir del día 2.

Se producían noticias alarmantes. Ese día aparecieron dos víctimas mortales en las inmediaciones de los Jardines del Real, posiblemente integrantes de las Brigadas Internacionales. Se certificaron las muertes como hemorragia aguda o herida traumática producida por golpe, continuando estos actos de violencia producidos principalmente por armas de fuego, fractura de cráneo o asfixia, estos serían los motivos que constaban en los certificados de defunción. Paulatinamente, se vieron cada vez más las personas portadoras de pistolas que, con una autoridad manifiesta, se creyeron con total derecho siempre que fuera en defensa del nuevo régimen, o sea, con auténtica licencia para matar.

La plaza de toros se constituyó en una auténtica prisión de concentración y distribución de los republicanos que se presentaban de forma voluntaria. El nuevo régimen proclamaba que no tenían nada que temer si no habían cometido delitos de sangre. Después se supo que no era así. Miles de personas fueron apresadas esperando ser distribuidos a otros centros carcelarios, mientras sus familiares se agolpaban en las puertas del coso taurino. Comenzaba una persecución implacable basada en la represión y la venganza. Así se pasó ese fatídico día para muchos de los valencianos. Otros dirían que fue el comienzo del Glorioso Año de la Victoria. Vencedores que sellaron uno de los momentos más trágicos de la historia, el comienzo de la dictadura franquista que permaneció durante más de cuarenta años. 1 de abril de 1939, una fecha para recordar.

Texto: Rafa Solaz

Sigue toda la última hora en el canal de Whatsapp de Radio Valencia: haz clic aquí y suscríbete para recibir toda la información y la actualidad del día en tu móvil.