Valencia CF Femenino: y ahora, ¿qué?

Valencia

El Valencia CF Femenino consumó este pasado fin de semana su descenso a la segunda categoría nacional tras una temporada muy negativa, marcada por una serie de decisiones clave erróneas y la plaga de lesiones que ha afectado al vestuario. Tras el empate en Badalona, el equipo valencianista se queda sin posibilidades matemáticas de seguir en Liga F a falta de una jornada.

Consumado el descenso que nadie deseaba, el club ya se ha puesto en marcha para iniciar el proyecto 25/26. Un plan que tendrá numerosos cambios en comparación con el de la temporada que está a punto de finalizar. La idea principal con la que se trabaja ya en el Valencia CF Femenino es la de darle forma a un grupo de trabajo que tenga como único objetivo el ascenso a Liga F.

Prueba de esta ambición deportiva es la oferta económica que el club trasladó a Enith Salón con el objetivo de que siguiera en Valencia incluso en Primera RFEF. Según ha podido saber la Cadena SER, la guardameta de Moncada tiene decidida su salida, que se hubiera producido igualmente aunque el equipo hubiera logrado la permanencia. Otras jugadoras importantes, como Pauleta Sancho, Marina Martí o Sara Tamarit sí continuarán en la plantilla del próximo año.

Eso sí, habrá cambios importantes, empezando por el cuerpo técnico y se darán numerosas modificaciones en las futbolistas que integren el primer equipo. La idea del Valencia Femenino es valencianizar todo lo posible el grupo, recuperar el ADN VCF y darle importancia a jugadoras nacionales para facilitar al máximo el proceso de adaptación de la plantilla 25/26.

El Valencia tendrá uno de los mayores presupuestos de la categoría. Pero la competición en Primera RFEF será tremendamente compleja, con rivales de alto nivel como Villarreal, Alavés, Osasuna, Betis, Oviedo o Tenerife, con el apoyo económico del Cabildo. El equipo seguirá jugando en el Puchades, aunque perderá la visibilidad televisiva de los encuentros de Liga F que retransmitía DAZN.

En esa apuesta económica importante para hacer una plantilla lo más competitiva posible seguirán siendo de enorme ayuda los sponsors, que no se bajan del barco en mitad de la tormenta. Muchos de ellos tienen contrato en vigor y ya han trasladado al club su deseo de seguir ligados al equipo a pesar de este contratiempo deportivo. Ojalá que la pesadilla solo dure un año.