La Guardia Civil auxilia a un joven de Benidorm al intentar subir al pico más alto de La Rioja sin experiencia ni material
Los esquiadores recomendaron al chico de 24 años descender con ellos, pero rechazó el consejo
Guardia
Ezcaray - Benidorm
El Grupo de Rescate e Intervención en Montaña (GREIM) de la Guardia Civil ha auxiliado a un joven de 24 años y vecino de Benidorm cuando intentaba alcanzar la cima del pico más alto de La Rioja, el pico de San Lorenzo, en Ezcaray, sin experiencia en montaña, sin equipamiento, ni material de escalada adecuados y con calzado deportivo.
Varios esquiadores en la estación de esquí de Valdezcaray avistaron al senderista en las inmediaciones del collado de Campos Blancos, en dirección al pico San Lorenzo, con la clara intención de alcanzar la cima, pese a las adversas condiciones meteorológicas, ha detallado este miércoles la Guardia Civil en La Rioja en una nota.
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Los esquiadores recomendaron a este joven descender con ellos, pero rechazó el consejo y persistió en su objetivo.
Agentes del GREIM se desplazaron en coche hasta Valdezcaray y continuaron en moto de nieve hasta el collado, desde donde ascendieron con esquís de montaña hasta localizar a este joven, quien estaba descongelando su calzado para poder seguir caminando.
Ante la nieve helada, la ausencia total de material invernal y los riesgos evidentes, los agentes le aconsejaron no continuar y le proporcionaron bebida y abrigo.
Tras varios minutos, accedió a descender al ser consciente del riesgo que conllevaba seguir adelante; se le ayudó a descongelar el calzado y se procedió a su descenso mediante la técnica de cuerda corta hasta un punto accesible, donde fue evacuado en un helicóptero de la Guardia Civil al aparcamiento de la estación.
En Valdezcaray recibió abrigo, calcetines y bebida caliente y, una vez repuesto, fue trasladado en un coche hasta el puesto de la Guardia Civil en Ezcaray para cargar su teléfono y secar el calzado, tras lo que continuó su viaje sin necesidad de asistencia sanitaria.
La Guardia Civil ha añadido que la intervención del GREIM evitó un posible accidente grave e, incluso, una muerte por congelación o despeñamiento, ya que el joven planeaba alcanzar la cima y descender sin piolets, sin crampones y sin experiencia en montañismo invernal, en unas condiciones que exigían un equipamiento específico.
