En busca del décimo afortunado: supersticiones, bulos y mitos populares
Desde un punto de vista estadístico, todos los números, sean considerados “feos” o “bonitos”, presentan exactamente la misma probabilidad de salir premiados.

No vamos a contar mentiras: «En busca del décimo afortunado: supersticiones, bulos y mitos populares»
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Alicante
La Lotería de Navidad combina ilusión y tradición y ambos elementos contribuyen a la aparición y persistencia de supersticiones, bulos y mitos en torno a los números. Muchas personas confían en la numerología y en patrones imaginarios, convencidas de que ciertos números son más “afortunados” que otros. Estas creencias se alimentan de sesgos cognitivos —como la ilusión de control o la búsqueda de coincidencias— y de influencias culturales que refuerzan esos espejismos colectivos. No obstante, desde un punto de vista estadístico, todos los números, sean considerados “feos” o “bonitos”, presentan exactamente la misma probabilidad de salir premiados.
Sinopsis de la refutación

Ciego vendiendo billetes de lotería en España, ilustración de la revista «Le Magasin pittoresque» de Edouard Charton, publicada en 1855. / API

Ciego vendiendo billetes de lotería en España, ilustración de la revista «Le Magasin pittoresque» de Edouard Charton, publicada en 1855. / API
Las supersticiones numéricas y la numerología surgen de la necesidad humana de encontrar sentido y control en un mundo regido por el azar y la incertidumbre. Desde tiempos antiguos, las culturas han atribuido a los números significados simbólicos, espirituales o incluso mágicos: el siete como cifra de la suerte, el trece como número maldito o el tres como símbolo de armonía y perfección. Estas asociaciones, aunque profundamente arraigadas en la tradición, no responden a fundamentos empíricos, sino a construcciones culturales y psicológicas que otorgan a los números un valor emocional y trascendente (ver [i], [iii]. [vi], [viii] ó [xi]).
En el contexto de la lotería, estas creencias se manifiestan con especial intensidad. Muchas personas eligen sus décimos en función de su fecha de nacimiento, aniversario, combinaciones “especiales” o números que “les inspiran confianza”, convencidas de que ciertos dígitos pueden atraer la fortuna. Este comportamiento se ve reforzado por sesgos cognitivos bien documentados, como la ilusión de control —la tendencia a sobrestimar la influencia personal sobre acontecimientos puramente aleatorios— y el sesgo de patrón o apofenia, que lleva a percibir regularidades donde solo existe casualidad (ver [iv], [ix] ó [x]).

29 de junio de 1946. Personas frente a un quiosco de lotería. Publicación original: Picture Post - 4101 - Inside Spain (1946) / Haywood Magee

29 de junio de 1946. Personas frente a un quiosco de lotería. Publicación original: Picture Post - 4101 - Inside Spain (1946) / Haywood Magee
Sin embargo, desde el punto de vista estadístico, todas las combinaciones tienen exactamente la misma probabilidad de resultar premiadas. En el Sorteo Extraordinario de Navidad se introducen en el bombo cien mil números, del 00000 al 99999, todos idénticos – teóricamente – en tamaño, peso y material, y sometidos a un proceso de extracción aleatorio supervisado por notarios. Cada uno de ellos posee una probabilidad de 1 entre 100 000 de obtener el primer premio, sin que ningún número tenga ventaja alguna por su forma, terminación o simbología asociada (ver [ii], [v] ó [vii]).
A lo largo de la historia, tal y como puede observar en la siguiente figura, el primer premio ha caído 65 veces en un número entre 00000 y 09999; 43 veces, entre 10000 y 19999; 31 veces, entre 20000 y 29000; mientras que solo 2 veces entre 80000 y 89000; y ninguna vez entre 90000 y 99999.


Pero no se sorprenda, porque esto no es más que la consecuencia de los frecuentes cambios que ha sufrido el rango de números que han sido incluidos en el bombo a lo largo de la historia. No en vano, desde 2011 hay 100000 números (del 00000 al 99999). Anteriormente, de 2005 a 2010, entraron en juego solo 85000 números. Y, en el otro extremo, en 1832, solamente fueron 12000 números.
Por tanto, la creencia de que existen “números afortunados” carece de sustento lógico o estadístico. Lo que a menudo se interpreta como una “racha” o una “señal del destino” no es más que la manifestación del azar natural en secuencias aleatorias, en las que la mente humana tiende a ver causalidad donde solo hay coincidencia. La refutación de estas supersticiones pretende subrayar que el azar, por definición, es impredecible.

El número '00000' al inicio del Sorteo Extraordinario de la Lotería de Navidad 2022, en el Teatro Real de Madrid, el 22 de diciembre de 2022. / Europa Press News

El número '00000' al inicio del Sorteo Extraordinario de la Lotería de Navidad 2022, en el Teatro Real de Madrid, el 22 de diciembre de 2022. / Europa Press News
Referencias
(i) Alternative Science. (s.f.). Why numerology is not a science.
(ii) Aragón Basanta, E. (s.f.). ¿Cuál es la probabilidad de que me toque la lotería? Los Ojos de la Tierra.
(iii) Dudley, U. (1997). Numerology or what Pythagoras wrought. American Mathematical Society. ISBN: 0-88385-524-0.
(iv) Federación Española de Sociedades de Profesores de Matemáticas. (2018, 3 de enero). Lotería. FESPM.
(v) Haigh, J. (2003). Matemáticas y Juegos de Azar: Jugar con la Probabilidad. Tusquets Editores.
(vi) IFLScience. (2023). Numerology: How to tell real science from pseudoscience. IFLScience.
(vii) Loterías y Apuestas del Estado (2024). Dossier de Prensa – Lotería de Navidad 2024.
(viii) Paulos, J.A. (1990). El Hombre Anumérico. Tusquets Editores. ISBN: 978-84-9066-211-3.
(ix) Rogers, P. (1998). The cognitive psychology of lottery gambling: A theoretical review. Journal of Gambling Studies 14, 111–134.
(x) The Switch. (s.f.). El fenómeno de la lotería en España.
(xi) Tomé, C. (2014, 30 de julio). El enigma del número 23. Cuaderno de Cultura Científica.
Julio Mulero

Silvia Cárceles Pozo

Silvia Cárceles Pozo
Profesor Titular de Universidad en el Departamento de Matemáticas, Facultad de Ciencias de la Universidad de Alicante.
Secretario del Departamento de Matemáticas. Autor de numerosos artículos de investigación en el área de Estadística y la Investigación Operativa. Autor de tres manuales docentes, una monografía de investigación y tres libros de divulgación matemática. Divulgador en redes sociales, centros de enseñanza y otras instituciones.
‘No vamos a contar mentiras’
Todos los martes, a las 13:45 horas, Miguel A. Goberna, profesor emérito de Matemáticas de la UA, les propone un bulo científico que todos, o casi todos, hemos escuchado o leído en alguna ocasión en un medio de comunicación, en una red social o en un libro.
Son los profesores e investigadores de la Facultad de Ciencias de la Universidad de Alicante quienes refutarán esas falsedades. Y es que, como diría Goethe (pero nunca dijo): “¡Ciencia! ¡Más ciencia!”.





