“Refugios bien de altura: espacios sin cobertura”, la red que impulsa la desconexión digital en la Comunitat Valenciana

València

La Asociación Española de Municipios de Montaña ha puesto en marcha el programa “Refugios bien de altura, espacios sin cobertura”, una iniciativa que invita a adolescentes, jóvenes y también adultos a redescubrir el ocio sin pantallas en diferentes municipios de la Comunitat Valenciana. Se trata de la mayor red de espacios de desconexión digital que ha transformado albergues y refugios de montaña en entornos libres de móviles durante estancias que van desde 24 horas hasta dos semanas. El objetivo es combatir la dependencia tecnológica que, impacta en el bienestar emocional, el sueño y la capacidad de concentración.

Jaime Pire, portavoz de la Asociación Española de Municipios de Montaña, ha explicado en Hoy por Hoy Valencia que cada albergue dispone de un espacio de custodia seguro y de un contacto permanente para emergencias, gestionado por el responsable del centro o por los monitores. “La idea es que el móvil se guarda durante toda la estancia y que puedas vivir sin tenerlo a mano”, señala el portavoz. Y si ocurre cualquier incidencia, la comunicación se canaliza a través del equipo del refugio.

Las estancias se organizan en dos formatos principales: fines de semana o programas de una semana o quincena, especialmente pensados para grupos escolares, escoletas, campamentos, asociaciones juveniles o familias. Muchos de estos espacios ya funcionaban como albergues tradicionales, pero ahora incorporan la desconexión digital.

Durante la estancia, los participantes realizan actividades guiadas que sustituyen el tiempo de pantalla por experiencias compartidas. En el caso de Vilafranca del Cid, por ejemplo, el albergue La Parreta propone rutas interpretativas, visitas teatralizadas sobre la piedra en seco, talleres de fauna y vegetación, excursiones a masías y actividades agropecuarias. “Queremos que la gente descubra que puede vivir experiencias más intensas sin el móvil”, asegura Sergio Monfort, responsable del albergue La Parreta.

Beneficios inmediatos

Desde la asociación subrayan que los efectos positivos aparecen tras las primeras 48 horas. “Las primeras 24 horas son las más conflictivas”, reconoce Pire, por la ansiedad que genera dejar un hábito tan arraigado. Y certifica que pasado ese umbral, aparecen mejoras claras: baja el cortisol, disminuye la sensación de estrés y aumenta el bienestar general.

En estancias más largas, de entre cuatro y siete días, el portavoz de la Asociación Española de Municipios de Montaña afirma que se han observado mejoras en la capacidad cognitiva, en la resolución de problemas y un aumento de la creatividad de hasta un 50%. La iniciativa cuenta con el asesoramiento del grupo Armacol de la Universitat de València, que ha acompañado el diseño del programa y su enfoque científico.

Adultos con la misma problemática

Aunque la iniciativa está dirigida a adolescentes y jóvenes, también pueden adherirse adultos. “Tenemos el mismo problema, si no más”, admite Pire.

En este sentido, el portavoz recalca la importancia de crear consciencia tanto "de la dependencia" así como "de la libertad que nos ofrece el estar sin móvil durante un tiempo".

La red de refugios adheridos puede consultarse en biendealtura.es, donde se actualizan las nuevas incorporaciones y las experiencias disponibles. En el caso de Vilafranca del Cid, La Parreta ofrece programas de fin de semana y actividades familiares en fechas concretas para facilitar la participación de grupos pequeños.

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