Aguirre considera una ofensa la manifestación atea
Lo que comenzó como una petición de "procesión atea" en Madrid ha desembocado en una polémica inaudita en la capital, con las administraciones pasándose la pelota, y la interposición de querellas por parte de colectivos ultra católicos.
El Ayuntamiento de Madrid ya ha mostrado su firme rechazo a la manifestación porque considera que es "una burla" dirigida a la fe y las convicciones de los ciudadanos, al tiempo que asegura que puede ocasionar problemas de orden público. En términos parecidos se ha pronunciado hoy la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, que considera que esa iniciativa supone "una ofensa a los católicos madrileños que no se atreverían a hacer jamás en relación a otra religión.
Por si fuera poco, antes incluso de saber si la marcha es o no autorizada, a los convocantes, la Asociación Madrileña de Ateos y Librepensadores AMAL y la Asociación de Vecinos La Playa, del madrileño barrio de Lavapiés, ya les han llovido dos querellas por "incitación al odio y contra los sentimientos religiosos". Un revuelo que Luis Vega, presidente de AMAL (Asociación Madrileña de Ateos y Librepensadores) observa atónito. "Esto demuestra, lamentablemente, una de nuestras teorías: que España no es en la práctica un estado aconfesional y que las reglas del juego no son iguales para todos, sino que sigue habiendo privilegios para la Iglesia Católica, que entre otras cosas no tiene que pedir permiso a nadie para celebrar sus procesiones cortando al tráfico media ciudad, mientras a los demás se nos fustiga sólo por pensar de manera diferente". "Es evidente que nada de esto habría pasado si la manifestación la convocan los "Amigos del toro" o de la "Capa española", y sin embargo, si la hacemos nosotros se organiza todo este revuelo".
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AMAL asegura que la protesta es completamente respetuosa, no busca confrontación alguna con las personas que profesan la religión católica y pretende, simplemente, reivindicar el derecho a opinar de forma diferente. "Que yo sepa, ese jueves no es patrimonio de nadie en particular, y para quienes no somos católicos es un día como cualquier otro". Vega recuerda además que en los tres recorridos propuestos a la Delegación del Gobierno discurren por calles que no coinciden con ninguna de las procesiones de Semana Santa previstas en la capital.
Vega espera que la Delegación del Gobierno autorice finalmente una marcha, solicitada en "tiempo y forma", aunque es pesimista. "Mucho me temo que las instituciones en este país siguen sometidas a las presiones, que son muy fuertes y poderosas, de la Iglesia Católica, y eso lo demuestran las dos querellas que nos han presentado tanto la Asociación Estatal de Abogados Cristianos como el colectivo Hazte Oir".
Esta última organización entregará mañana jueves en la Delegación del Gobierno cerca de 90.000 firmas para pedir que prohíba la manifestación porque "no se puede permitir insultar a nadie por creer en Dios".
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Luis Vega, Asociación Madrileña de Ateos: "Que se nos prohíba manifestarnos demuestra que España no es un estado aconfesional"




