Contra el macroproyecto de los casinos

Cantando, disfrazados de chulapos y parodiando la popular banda sonora de la película "Bienvenido Mr. Marshall", su objetivo este sábado en la Puerta del Sol era informar a los madrileños de cuáles son las exigencias de Adelson para ubicar su proyecto en Madrid. En Cataluña se ha constituido una plataforma similar y ya se planean acciones conjuntas

La Plataforma No Eurovegas insiste: unas exigencias como las que pone sobre la mesa el magnate de Las Vegas Sands sólo plantearse en un contexto de crisis como el actual: "La coyuntura de crisis se está instrumentalizando, por un lado, por parte de las administraciones públicas, para hacer cualquier cosa en nombre del empleo. Por otro lado, no tenemos ninguna duda de que la propia crisis es una motivación para el empresario transnacional para invertir aquí", explica Rodrigo Fernández, uno de los organizadores de la protesta". Natalia, una de sus compañeras, añade: "No es casual que este señor venga aquí, a España, al país con el nivel de desempleo más alto de la UE, a hacer este tipo de inversiones".

Bajo el lema "¿Bienvenido Mr. Adelshon? Eurovegas No", han conseguido reunir a más de un centenar de personas en la Puerta del Sol entre curiosos y madrileños indignados con la posibiidad de que el proyecto recale en la región: "Tenemos que pensar qué futuro queremos como sociedad, y si la crisis ha demostrado algo es que hay una forma de economía que no funciona. Repetir los errores bendiciendo a un extranjero que viene cargado de millones es una forma de no avanzar", explicaba uno de ellos. A su lado, otro manifestante, pancarta en mano, añadía: "Las exigencias no me gustan. Que tengamos que cambiar nuestras leyes, que no pague a Hacienda, que no pague el IBI... Es inaceptable". Ni siquiera la promesa de puestos de empleo les convence: "No es sólo el empleo que se genere, sino las condiciones en que se general. Si conlleva convertir España en un paraíso fiscal, la ciudadanía no lo va a ver bien".

Los portavoces de la plataforma, compuesta por asociaciones ecologistas, activistas del 15M, abogados, defensores del turismo responsable y sindicatos han leido un manifiesto en el que han desglosado, uno a uno, los efectos que, a su juicio, tendría instalar este proyecto del ocio, juego y turismo en Madrid. Su primera protesta organizada ha concluido con el anuncio de nuevas movilizaciones.