La Diputación abrirá tres centros para atender a los dependientes leves
El cambio respeta "el espíritu" de la Ley de Dependencia y no afectará a los dependientes de grado dos y tres, que mantendrán intactas las ayudas
La titular de Acción Social ha comparecido en la sede de Juntas Generales para detallar su presupuesto, que absorve cuatro de cada diez euros del gasto departamental. Dispone de casi 453 millones de euros, son 12 millones menos que en el presente ejercicio, pero "no se han rebasado las líneas rojas" y se mantiene el sistema de protección
Es el departamento que tiene un mayor peso en el proyecto del Presupuesto foral y su titular la encargada de abrir el desfile de diputados en la sede de Hurtado Amézaga para explicar partida por partida el gasto y las inversiones previstas de cara al próximo año. Dispondrá de casi 453 millones de euros -una merma del 2,65% con respecto a 2012- que ha obligado al resto de departamentos a "hacer un esfuerzo", según la propia diputada, Pilar Ardanza. "Sin rebasar las líneas rojas", Ardanza ha explicado que la "convicción" del ejecutivo es "mantener el sistema de protección" y seguir invirtiendo en los colectivos más necesitados. La suma de partidas destinadas a mayores, subvenciones a la dependencia y discapacidad se llevan siete de cada diez euros.
Entre los aspectos más controvertidos, además de la supresión de los viajes Adineko, es que la diputación dejará de asumir el complemento que suprimió el ejecutivo central. Este 2012 se ha calificado a 700 personas que han recibido una media de 180 euros. "Respetando la letra y el espíritu" de la Ley de Dependencia el ejecutivo de Jose Luis Bilbao sustituirá, a partir del año que viene, esas prestaciones económicas por servicios. Ardanza ha anunciado que creará tres centros para la promoción de la autonomía personal. Allí acudirán "una o dos veces por semana para realizar, por ejemplo, ejercicios de estimulación". Otra de las novedades, será la creación centros de capacitación para facilitar la inserción laboral de colectivos en riesgo de exclusión, como enfermos de VIH o personas con adicciones.




