Sociedad | Actualidad

La acogida no sirve de atajo para la adopción

Además de los beneficios emocionales, tiene económicos, reciben una ayuda anual que este año ha rondado los 2.000 y 5.000 euros

Casi 600 menores viven en familias de acogida. No hay nadie a quien les una parentesco, es una solución que hace de puente entre su vida y la de padres biológicos que por una temporada no están para hacerse cargo de ellos

Una acogida no es una adopción, y eso lo primero que advierten en el Instituto del menor a las familias que quieren comenzar el proceso. "El técnico nos dijo que todos los que fuesen como un atajo para la adopción se habían equivocado, al final el resultado es el mismo. Nosotros tenemos dos hijos y decidimos acoger porque no teníamos la necesidad vital de decir: Tenemos que llenar una cuna o queremos llevarle a la guardería".

Más información

Escuchábamos a uno de los padres que este año ha acogido a uno de los 600 niños que tutela la Comunidad en ese tipo de régimen. "Hay varios tipos de régimen, el permanente es una modalidad más indefinida, para aquellos padres que tienen menos posibilidades de recuperarse, el otro tipo es la tempral, para temporadas más cortas, o circunstancias imprevistas de los padres que han tenido algún problema económico o una enfermedad", explica Jesús Rubio, responsable de la Unidad de Acogimiento".

Aunque el proceso de acogida es más breve que el de adopción, conseguir que una familia ajena coja a niños con dificultades o a grupos de hermanos es más laborioso. Tras conseguir que estos se integren en un nuevo hogar tanto las familias como las instituciones se plantean que los jóvenes lleguen a vivir con ellos hasta los 18 años.

Ser familia de acogida, además de los beneficios emocionales, tiene económicos, reciben una ayuda anual que este año ha rondado los 2.000 y 5.000 euros.

 
  • Cadena SER

  •  
Programación
Cadena SER

Hoy por Hoy

Àngels Barceló

Comparte

Compartir desde el minuto: 00:00