Un instituto se rebela contra Educación por aprobar a un alumno contra el criterio del centro
La Junta otorgó el título de Secundaria al estudiante pese a que había suspendido cinco asignaturas, según ha denunciado el claustro del Instituto Los Álamos, en Bormujos
la Delegación de Educación dictó una posterior resolución, de 12 de febrero del 2013, ante la reclamación interpuesta por la madre del alumno por lo no titulación de su hijo, y decidió otorgarle al reclamante el título de Graduado en Secundaria.
El claustro de profesores del IES ''Los Álamos'' de Bormujos ha denunciado que la Delegación de Educación de Sevilla ha otorgado la graduación en Secundaria a un alumno con cinco asignaturas suspendidas. Dos de ellas se las aprobó la administración en contra del criterio de los docentes.
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El claustro de profesores de dicho instituto ha expresado su queja por escrito por la resolución del expediente de reclamación 170/2012 que ha dictado la Delegación Provincial de la Consejería de Educación. Con esta resolución, la Junta aprueba al reclamante las asignaturas de Lengua Castellana y Literatura e Inglés de las cinco que tenía suspendidas.
Además, la Delegación de Educación dictó una posterior resolución, de 12 de febrero del 2013, ante la reclamación interpuesta por la madre del alumno por lo no titulación de su hijo, y decidió otorgarle al reclamante el título de Graduado en Secundaria.
Para ello, la Delegación considera que las tres materias que no se le aprobaron en reclamaciones anteriores (Biología y Geología, Ciencias Sociales y Física y Química) "no impiden la titulación ni menoscaban la formación académica y las competencias necesarias que permitirán al alumno reclamante afrontar una brillante carrera en cualquiera de los objetivos académicos o laborales que se proponga".
A los profesores, en su escrito, les parece "un ejercicio de fariseísmo que desde los estamentos de la administración educativa y desde la sociedad se clame por la honorabilidad, el respeto y el prestigio de la labor docente, así como por la autoridad del profesorado y que, llegado el caso, todos estos valores se desprecien y ninguneen".
Asimismo, los profesores denuncian que la "parcialidad con que se contemplan derechos y deberes -a qué se está obligado según se sea padre o profesor- raya en la prevaricación".
Tras expresar su respeto por el derecho a reclamar de cualquier ciudadano ante la administración, precisan que la labor docente "no es un mero ejercicio burocrático sino encaminada a contribuir en la formación de personas competentes para la sociedad".
Los principales motivos de la queja del profesorado son que de la resolución administrativa "se desprende que la atención al alumno y su proceso evaluador han sido deficientes, como reclaman sus progenitores".
En este sentido, han lamentado que no se hayan tenido en cuenta las aportaciones por parte de la tutora y del equipo educativo sobre la negligencia de los padres que, tras recibir las calificaciones de su hijo con resultados poco alentadores en las dos primeras evaluaciones, no mostraron preocupación por estos hechos.
Asimismo, denuncian que se "pone en duda la profesionalidad de los docentes" al afirmar que las copias de los exámenes de Inglés remitidas como documentación han sido manipuladas, lo que supone, además de un acto de difamación, imputar un delito a las profesoras de dicha asignatura.
Igualmente, sostiene el claustro que los argumentos de Educación sobre un "inadecuado proceso de evaluación según la normativa vigente no se sostiene" porque, entre otros motivos, los fundamentos para aprobar al demandante en Inglés y mantener el suspenso en Biología y Geología son básicamente los mismos.
Han alegado también que este centro educativo tuvo el pasado curso un proceso de "actuación prioritaria por parte de la inspección educativa" y no se requirió la supresión o corrección de los criterios de evaluación y calificación de las programaciones de los distintos departamentos didácticos.