Demostración de fuerza de la comunidad educativa
Unas 50.000 personas han llenado este mediodía las calles del centro de Barcelona para pedir al ministro Wert que retire su propuesta de ley educativa, que de momento el gobierno se plantea no aprobar mañana, y para exigir al gobierno de Artur Mas que priorice el gasto en educación
Los sindicatos cifran el seguimiento de la huelga en un 55% de los maestros, mientras la consejera de Educación, Irene Rigau lo rebaja hasta el 19%.
Más información
Los sindicatos consideran que la comunidad educativa ha dejado claro hoy que ni está de acuerdo con la política de recortes del ejecutivo de Artur Mas ni con la voluntad segregadora y privatizadora de la reforma educativa que impulsa el ministro Wert. Desde el sindicato USTEC, Rosa Canyadell cree que "el ministro Wert debería parar esta ley y negociar" y que a la consellera Rigau la comunidad educativa le está diciendo que "no podemos soportar más recortes y que si continúa se irá al traste esta escuela pública que dice que tanto ama".
La responsable de educación de CCOO Montse Ros reconoce que la respuesta ha sido más potente a la protesta que en las aulas esta mañana "y lo entiendo, porque no es fácil perder un día de sueldo cuando eres interino y ya te han recortado un 15% tu salario". De todas formas cruz que tanto el ministro como la consejera Rigau equivocarán si no atienden la protesta de maestros, estudiantes y familias. "Tenemos que poder arreglar el tema de las sustituciones, la situación del 0-3, el tema de las tasas a la Formación profesional porque tenemos jóvenes que no pueden trabajar ni tampoco estudiar". "La consellera Rigau, sentencia, tiene que apretar las tuercas al consejero de Economía".
Desde UGT, Roser Font advierte que la reforma legal del PP y la actuación diaria del gobierno de CiU "nos lleva hacia un cambio modelo de la escuela pública. Quieren transformar un sistema público, garante de la igualdad de oportunidades y gratuito en un modelo donde se introducen criterios de mercantilización, donde se podrá privatizar la escuela porque convierten lo que hasta ahora eran sujetos de un derecho, en usuarios de un servicio".
La marcha ha llenado de camisetas amarillas la distancia que separa la plaza de Sant Jaume de la plaza Universidad y ha tardado casi tres horas en hacer el recorrido. La Guardia Urbana cifra los asistentes en 10.000 personas mientras que los convocantes hablan de 100.000.
Soledad Domínguez
Redactora de informativos en Ràdio Barcelona, especializada en Educación. Siempre que me dejan, me cuelo...