El juez ha decretado el ingreso en la prisión de Basauri (Vizcaya) del falso «»maestro shaolín«» Juan Carlos Aguilar, acusado de dar muerte a dos mujeres, Jenny Sofía Rebollo, colombiana de 40 años, y Mauren Ada Otuya, nigeriana de 29 años. Jenny Sofía Rebollo es la mujer colombiana que, supuestamente, descuartizó Aguilar la pasada semana. Tenía 40 años de edad y ejercía la prostitución, al igual que Mauren Ada Otuya, la nigeriana de 29 años a la que agredió brutalmente el pasado domingo y que este miércoles ha fallecido en el Hospital de Basurto, donde ingresó en estado de coma. Tras localizar a Aguilar en el gimnasio que regentaba en Bilbao, donde había secuestrado a Ada, a la que iba a dar muerte tras agredirla salvajemente, en el interrogatorio en comisaría, el agresor reconoció que también había matado a otra mujer la pasada semana. Los agentes encontraron los restos de la primera de las víctimas dentro de bolsas de plástico en el gimnasio y la vivienda del experto en artes marciales. La Ertzaintza halló, entre otros fragmentos del cuerpo, dedos y parte de la columna vertebral. La huellas dactilares de la mujer colombiana han facilitado su identificación, ya que la Policía autonómica vasca las tenía en su archivos tras haberla identificado hace años por resistencia a la autoridad. A las diez de este miércoles, Juan Carlos Aguilar ha sido conducido al Palacio de Justicia de Bilbao, para que prestara declaración ante la autoridad judicial, custodiado por dos vehículos policiales y un tercer coche camuflado. Tras prestar declaración ante el juez, éste ha ordenado el ingreso en prisión del detenido.