La Seminci vuelve a apostar por el cine de autor
El festival cuenta con un presupuesto muy parecido al del año pasado, que ronda los 2,2 millones de euros de los que casi la mitad procede de las arcas municipales
El director de la Seminci, Javier Angulo, posa en la alfombra roja junto a la actriz Marisa Paredes(RUBÉN CACHO/ICAL)
La Semana Internacional de Cine de Valladolid, vuelve a centrar su contenido en el denominado "cine de autor", un aspecto muy valorado por actores españoles como Nacho Novo, que durante la gala de inauguración del festival, hizo hincapié en este aspecto "que diferencia a la SEMINCI, del resto de festivales. Por su parte el Ayuntamiento de Valladolid, lamentó a través de la concejala de cultura Mercedes Cantalapiedra, la escasa aportación tanto de la Junta de castilla y León como del Gobierno central, que no llega ni a "la décima parte de lo que aporta el Ayuntamiento de Valladolid".
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La Semana Internacional de Cine de Valladolid, vuelve a centrar su contenido en el denominado "cine de autor", un aspecto muy valorado por actores españoles como Nacho Novo, que durante la gala de inauguración del festival, hizo hincapié en este aspecto "que diferencia a la SEMINCI, del resto de festivales.
Por su parte el Ayuntamiento de Valladolid, lamentó a través de la concejala de cultura Mercedes Cantalapiedra, la escasa aportación tanto de la Junta de castilla y León como del Gobierno central, que no llega ni a "la décima parte de lo que aporta el Ayuntamiento de Valladolid".
El cineasta norteamericano Paul Schrader es uno de los nombres propios de la 58ª Semana Internacional de Cine de Valladolid, que le dedica una de sus retrospectivas a la faceta como director del guionista de 'Taxi Driver', además de una publicación monográfica firmada por la revista 'Caimán Cuadernos de Cine'. El Teatro Calderón acogió anoche el estreno en España de su última película, 'The Canyons', un 'thriller' erótico sobre la decadencia que fue recibido con disparidad de opiniones y ácidas críticas por el público del certamen.
Schrader ahonda en el film en las constantes vitales de su trayectoria como director y como guionista: personajes solitarios, frustrados emocionalmente, incapaces de empatizar con quienes les rodean y que en muchos casos encuentran en el sexo una de sus escasas vías de conexión con la sociedad. 'Hardcore: un mundo oculto' (1979), 'El placer de los extraños' (1990), 'Forever Mine' (1999) o 'Auto Focus' (2002) entroncan con la propuesta que retoma el cineasta en 'The Canyons', que aquí se aleja de la sobriedad estilística que utilizó en 'Aflicción' (1997), una de sus mejores películas, para desnudar los oropeles del Hollywood actual
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Mercedes Catalapiedra lamenta la escasa financiación de la Junta
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Nacho Novo destaca la importancia de la SEMINCI
