La Generalitat quiere que el cigarrillo electrónico se persiga como el tabaco

La Agencia de Salud Pública catalana alerta sobre los riesgos del cigarrillo electrónico y el desconocimiento sobre su alcance

La Agencia de Salud Pública de Catalunya, un organismo de la Generalitat, ha anunciado su intención de equiparar los cigarrillos electrónicos con los preceptos de la ley antitabaco, para lograr a lo largo de 2014 que no se puedan utilizar en ningún espacio cerrado, público o privado, mediante un anteproyecto de ley para su debate en el Parlament.

"Pondremos todo el esfuerzo para que esto sea posible", ha subrayado el director general de la Agencia, Antoni Mateu, quien ha subrayado que antes de final de año el gobierno catalán aprobará un acuerdo para su prohibición en todos los edificios públicos competencia de la Generalitat y en todos los centros sanitarios.

Más allá de esta primera prohibición -que podría ser adoptada también por los espacios públicos de titularidad municipal-, el Govern pedirá en una ley específica catalana que las restricciones se apliquen también al acceso de los menores de 18 años sobre estos productos, lo que además limitaría su publicidad y posibles patrocinios.

"Actualmente no existe ninguna normativa que regule los cigarrillos electrónicos y como nadie se está moviendo, hemos decidido avanzarnos y actuar allí donde tenemos competencia", ha explicado Antoni Mateu

Y lo han hecho ante la reciente aparición de estudios internacionales que demuestran los efectos nocivos para la salud de los fumadores a corto plazo. Los efectos a largo plazo del cigarrillo electrónico aún se desconocen.