Lakua da por zanjadas las retenciones de crédito
Sostiene que ninguna está vigente y que se ralentizaron los pagos de ayudas y facturas por "prudencia". El Gobierno dejó de ingresar en abril 750 millones de las Diputaciones
Nuevo contratiempo para el Gobierno de Urkullu. Las tres Diputaciones vascas han solicitado posponer el pago de 750 millones de euros que debían aportar a la hacienda vasca, de los que 450 millones corresponden a la Diputación de Gipuzkoa. Alava y Bizkaia han pedido aplazar a partes iguales otros 300 millones.
Esa cantidad supone aproximadamente el gasto mensual del Gobierno vasco, sobre un presupuesto anual que apenas supera los 10.000 millones de euros. Se trata por tanto de una cuantía considerable.
La petición se cursó a principios de abril, entre los días 9 y 11. En ese momento, las cifras de recaudación eran malas. Las haciendas forales estaban ingresando por debajo de lo previsto y el Gobierno vasco, por prudencia, decidió ralentizar el pago de facturas, ayudas y subvenciones en un porcentaje del 20%, situación de la que alerto precisamente hace un mes el partido socialista.
Ahora el Ejecutivo reconoce que tomó esa decisión, pero que "a día de hoy no existe ninguna retención de crédito autorizada".
Según consta en una respuesta remitida al Parlamento vasco por el Departamento de Hacienda, "las inmovilizaciones han respondido a reservas para financiar modificaciones presupuestarias, ninguna vigente a día de hoy", lo contrario, asegura "hubiese sido poco prudente" y "con la idea de no gastar más de lo que se tiene".
Todo indica que, fruto de la crisis, las administraciones vascas siguen soportando tensiones de tesorería, ahora en fase de relajación, coincidiendo con la recuperación de la recaudación, que ha mejorado en el último mes, situándose por encima de lo previsto por primera vez en lo que va de año.
