El granizo agrava los problemas generados por la sequía en el sur de Valencia y norte de Alicante

"Si hubiera sido solo agua, hubiera sido fantástica". Así define la situación Ramón Mampel, secretario general de la Unió de Llauradors, que alerta de que ahora entramos en una época de peligro de tormentas que si vienen todas así remataran lo que no ha matado la crisis

La Font de la Figuera, Fontanars y Villena se llevaron la peor parte de las tormentas de granizo de ayer. Recogieron casi 60 litros por metro cuadrado que afectaron especialmente a vides, fruta dulce y frutos secos, sobre todo almendras.

No hay números todavía. Pero tanto la Asociación Valenciana de Agricultores como la Unió de Llauradors sí que aseguran, como el ayuntamiento de Villena, que la piedra de ayer hizo daño en esos municipios. Ramón Mampel, secretario general de la Unió ha sido muy gráfico: si en lugar de granizo hubiera caído sólo agua hoy estaríamos de enhorabuena.

Y es que afirma que dada la actual situación cualquier gota de lluvia es bien recibida, de hecho, la lluvia caída en poblaciones como Requena (30 litros por metro cuadrado) ha sido recibida como una bendición. Y abundando en la sequía asegura que es momento de que todo el sector, de la mano del gobierno valenciano, insten al ministerio para que publique ya las ayudas por sequía y paliar en algo una temporada para olvidar.