El STEC eleva a la Fiscalía la situación del colegio El Boliche

El portavoz del STEC-Intersindical Canaria ha confirmado que han elevado a la Fiscalía de Menores la situación del colegio El Boliche, en el barrio de Siete Palmas de Las Palmas de Gran Canaria. Los niños no han comenzado las clases porque sus padres se niegan a que den clases en las aulas modulares dispuestas por la consejería mientras termian las obras el nuevo centro, que se han retrasado.

Los niños del colegio El Boliche siguen sin ir a clase. Ayer sus padres se negaron a llevarlos, protestando de esta forma a la solución dada por la consejería de Educación a la situación del centro, que está obsoleto y sin espacio. Supuestamente las obras del nuevo colegio, ubicado en la misma zona de la ciudad, tendrían que haber estado terminadas al comienzo del curso. Sin embargo, varios retrasos han hecho que no pueda habilitarse el centro, y el área de Educación del Gobierno de Canarias instaló unas aulas modulares en el patio del centro, que los padres rechazan.

Este miércoles el STEC-Intersindical Canaria ha elevado esta situación ante la Fiscalía de Menores porque entiende que se están vulnerando los derechos de los niños. Fernando Pellicer, portavoz del sindicato, afirma que "la situación es insostenible porque las infraestructuras son escasas y obsoletas, y la matrícula se ha aumentado exponencialmente". Ya el año pasado se tuvo que prescindir del aula de música, la biblioteca, el servicio de comedor y la acogida temprana por el incremento de niños matriculados. Pellicer añade que "la solución de la consejería es en un centro ya tremendamente saturado, sin espacio, instalar esos barracones".

Los padres de los menores se han reunido este miércoles con la viceconsejera de Educación del Gobierno de Canarias, Manuela Armas, para tratar de encontrar una solución. Lo que les ofrece es trasladar a los niños a otros centros de la ciudad durante el mes y medio en el que creen que estarán finalizadas las obras del nuevo colegio.