Primera goleada de Primera

Eibar

El Eibar ya sabe lo que es golear en Primera división. Contra el Almeria en Ipurua se ha dado todo un festín, con una manita histórica, porque es el resultado más abultado del club armero en la máxima categoría. Y de paso sirve para romper la sequía de victorias en casa, porque no ganaba desde la jornada innaugurual contra la Real Sociedad en el derbi gipuzkoano el 24 de agosto. Una goleada 5-2 en Ipurúa en un partido espectacular en el que, eso sí, ambos equipos estuvieron mejor en ataque que en defensa.

Los guipuzcoanos, que han hecho su mejor encuentro en Primera División y han logrado su segundo triunfo en casa, se adelantaron pronto en el marcador, lo que ocurre por vez primera en su campo, y jugaron sus mejores minutos de la temporada, llegándose al descanso con un claro 3-1. Para la media hora de juego, el Eibar ya había marcado tres goles, por medio de Piovaccari, Saúl Berjón y Albentosa, con una eficacia abrumadora. Con todo, antes del descanso, acertó Soriano, que acababa de entrar en el césped sustituyendo a Thievy, al aprovechar un balón suelto en el segundo palo para reducir diferencias y marcar el 3-1.

Tras el descanso, el Almería de Francisco volvió a la carga intentando reducir diferencias, de nuevo por medio de Soriano, el mejor atacante rojiblanco, que disparó de lejos un misil que se fue alto por muy poco. Pero el que sí acertó a marcar fue el central Raúl Navas, el 4-1, que cabeceó en el segundo palo un gran saque de esquina botado por Manu del Moral. Es el primer gol del sevillano en Primera.

Desatado el Eibar en ataque, con la grada volcada, en un fulgurante contraataque del azulgrana Capa se plantó en solitario ante Rubén, que despejó el tiro con el cuerpo, pero el Eibar hizo el 5-1 gracias a un golazo de Capa, cuyo tiro entró por la escuadra, a pase de Manu del Moral. También era el primero del portugalujo en la máxima categoría. El Eibar se relajó un poco y lo aprovechó el Almería para hacer el definitivo 5-2 por medio de Edgar, que marcó de volea en el segundo palo en un fallo claro en la defensa armera. Con todo, ese gol no empañaba una tarde mágica en Ipurua, la primera goleada de Primera. Cinco goles en un partido. Y 19 puntos en diciembre. Media permanencia en el bolsillo a estas alturas. Se dice pronto.