La célula yihadista detenida tenía fotos de edificios emblemáticos de Barcelona

Madrid

Los once detenidos este miércoles pasarán a disposición del juez Santiago Pedraz el próximo viernes y el magistrado tiene en sus manos diversos documentos -pruebas fotográficas- que apuntan a una "voluntad contrastada" de atentar en Cataluña, según ha indicado el conseller de Interior, Ramon Espadaler, en rueda de prensa. Formaban parte de una célula organizada que captaba a jóvenes, los radicalizaba y los enviaba a Siria e Irak para luchar junto al Estado Islámico. La dirección de este grupo estaba en manos de un español que se había convertido al Islam.

Los investigadores han descubierto en algunos de los teléfonos móviles de los miembros de la célula fotografías de edificios públicos emblemáticos de Barcelona que podrían ser los objetivos de un hipotético atentado. De momento no está contrastado ni existe ninguna fecha para la comisión de una acción terrorista como tampoco hay algún dato sobre la forma de perpetrar ese tipo de acción. Aun así, los investigadores de la Audiencia Nacional sí destacan que la presencia de este tipo de fotografías no obedece a un recuerdo personal ni a una foto turística.

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Las once personas arrestadas han sido detenidos gracias a un despliegue importante de Mossos d'Esquadra, más de 300 agentes que han rastreado algunos de los principales focos de reclutamiento en Terrassa o en el distrito de Sants, en Barcelona.

Estos detenidos guardan relación con las tres detenciones que se realizaron en diciembre de 2014 en la frontera entre Bulgaria y Turquía cuando tres vecinos de Terrassa, Sabadell y Monistrol de Montserrat (Barcelona) se iban a incorporar al Estado Islámico.

Los detenidos son diez hombres -uno de 17 años- y una mujer, de entre 17 y 45 años y nacionalidades española, marroquí y paraguaya, algunos de ellos conversos.

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En algunos de los registros los Mossos d'Esquadra han incorporado a perros de la unidad canina especializadas en la localización de explosivos. Hasta el momento no ha trascendido, sin embargo, si se han localizado sustancias en sus viviendas o el nivel de preparación de los presuntos terroristas.

Fuentes de la investigación han confirmado, sin embargo, que el grueso de la investigación se centra en el barrio de Ca N'anglada de Terrassa, donde residía uno de los tres presuntos terroristas detenidos el pasado año en Bulgaria.

En lo que va de año han sido detenidas una treintena de personas en España por su supuesta relación con el terrorismo yihadista en varias operaciones, entre las que destaca la que condujo el 13 de marzo al arresto de ocho presuntos miembros de una célula terrorista en Barcelona, Girona, Ciudad Real y Ávila. Todos eran españoles y cinco de ellos de origen marroquí.