Un aspirador gástrico contra la obesidad mórbida
Aspirar los alimentos desde el estómago con una máquina controlada por el propio paciente. Es un sistema pionero en España para conseguir que personas con obesidad mórbida puedan perder más de 20 kilos en seis meses
Barcelona
Para muchas personas con obesidad mórbida pasar por el quirófano para someterse a una intervención puede comportar riesgos muy importantes. Esta técnica, que en Europa sólo se ha implantado hasta ahora en Suecia y la República Checa, hace un año que se practica en el Hospital Quirón Teknon de Barcelona.
Es una alternativa no invasiva a la cirugía: al paciente se le hace una endoscopia para implantarle un tubo de silicona que va desde el estómago hasta el exterior del abdomen donde, después de hacer una comida, se conecta una pequeña máquina portátil que aspira hasta un 30% del contenido de la digestión antes de que el cuerpo haya absorbido las calorías.
El doctor Roman Turró explica que el tratamiento está indicado para personas con mucho sobrepeso, que no han conseguido adelgazar haciendo dieta o que tienen alterada la percepción de la cantidad que deben comer.
Los pacientes deben seguir esta práctica durante unos 18 meses. Después de los seis primeros se registra una pérdida media de 23 kilos o, lo que es lo mismo, del 40% del exceso de peso.
El tratamiento también debe ir acompañado de un cambio de los hábitos alimenticios para mantener en el tiempo la reducción de peso lograda.