Formar gobierno y gobernar
Eva Flores, socióloga y directora de la consultora Posmer, analiza el contexto poselectoral en Cataluña y las posibles consecuencias para Artur Mas
Mérida
Los independentistas han ganado en escaños, pero el número mayoritario de votos habla en favor de España. ¿Qué quiere decir esto?
Pues que estas elecciones ctalanas no eran plebiscitarias como nos han querido hacer ver y creer, ocultando el verdadero sentido electoral, que no es otro que elegir al partido que gobernaría Cataluña como autonomía durante los siguientes 4 años.
Ahora a 'Juntos por el sí' le toca la realidad de formar gobierno, pero el “socio” favorable para hacerlo, La CUP, impone condiciones que pueden tener consecuencias desagradables para Artur Mas.
Veremos ahora el real interés independentista de Mas ¿Se irá para favorecer la idea central de su programa?, o en cambio, ¿será la CUP la que acepte a Mas, supuestamente relacionado con la trama de corrupción de los Pujol, como presidente de la región?
Mientras tanto, el 52% de los catalanes se preguntan si al aún incierto presidente le preocupa resolver los problemas sociales y económicos de los ciudadanos, o ¿lo dejará en un segundo plano en virtud de la deseada independencia del 47% restante? Ahora es cuestión de prioridades.
