CDC ha depositado la fianza de 250.000 euros impuesta por la Audiencia de Tarragona para que el tesorero del partido, Andreu Viloca, pueda abandonar la prisión y quedó en libertad provisional en las próximas horas, después de estar entre rejas desde el pasado 22 de octubre por el caso del 3%. La fiscalía había pedido mantener entre rejas al tesorero de Convergència, Andreu Viloca, porque entiende que todavía hay riesgo que se pudieran destruir pruebas, sobre todo después que los investigadores encontraran papeles en la trituradora de su despacho en el partido a finales de agosto pasado. Pero la Audiencia Provincial no lo ve igual. Ha determinado que el tesorero de CDC podrá abandonar la cárcel donde lleva 21 días, si paga una fianza de 250.000 euros. A Viloca lo detuvieron el 21 de octubre. La fiscalía considera clave su papel en el presunto pago de comisiones de empresas a Convergencia para asegurarse obra pública que se habrían camuflado en donaciones a las fundaciones del partido. La Guardia Civil sigue investigando los miles de correos electrónicos intervenidos en su ordenador así como la documentación que se llevaron de la sede del partido a finales de octubre. A diferencia de lo que paso en el caso del empresario Jordi Sumarroca, cuya salida de la cárcel precipitó el último registro de Convergència, el juez del Vendrell motivó extensamente el ingreso en prisión del tesorero convergente, por riesgo de destrucción de pruebas, hallados documentos en su trituradora, y también de fuga del país. La Audiencia argumenta que el caso lleva ya más de dos años investigándose y que en ese tiempo Viloca podría haber destruido ya las pruebas. Además de la fianza de 250.000 euros, que el tesorero podría pagar hoy mismo, le mantiene retirado el pasaporte y le obligará a comparecer semanalmente en los juzgados.