La cruda lucha de la tutela de adultos

Madrid

Madrid es una de las pocas comunidades que cuenta con un organismo público para gestionar la tutela de aquellas personas que, por trastornos mentales, adicciones, etc., no pueden llevar una vida autónoma. Pero la Agencia Madrileña para la Tutela de Adultos (AMTA) atendía en 2014 a cerca de 5.000 personas con solo 39 profesionales en plantilla.

En Hoy por Hoy Madrid hemos conocido el caso de Antonio, toxicómano en tratamiento, tutelado por la comunidad aunque sigue en casa de su madre y bajo su supervisión.

También el padre de Mario nos ha contado su desesperación ante la actitud violenta y nerviosa que su hijo arrastra desde que dejó de consumir sustancias para muscularse. 

Desde la Asociación por los Derechos y la Dignidad de los Adultos Tutelados (AEDAT), demandan la creación de un observatorio que haga visible esta realidad, para poder dar una buena cobertura a las necesidades de todas estas familias.

Grandes trabas en la tutela de adultos

Pilar Palao y Luis Redondo, portavoz y trabajador social de AEDAT, inciden en cuatro problemas básicos que se encuentran las familias que precisan de ayuda:

- Feminización del cuidado. Históricamente las mujeres han adoptado el papel de cuidadoras, mientras el hombre se dedica a la gestión económica. Esta situación no ha cambiado con los años.

- Violencia institucional / burocrática. Los trámites para lograr la tutela de un adulto llevan un proceso que puede prolongarse hasta dos años. En este tiempo el problema se agrava, en ocasiones, con consecuencias irreversibles.

- Falta de atención personalizada al tutelado. La Agencia Madrileña gestiona el patrimonio de los tutelados, pero no cuenta con los medios para hacer un seguimiento a cada uno de ellos.