¡Viva la madre que te parió!

San Sebastián

Esta Real Sociedad sí que la compro. Así de claro. Con los ojos cerrados. No pienso ni un minuto. La del triunfo contra el Barça. Un equipo txuri-urdin pleno de energía, garra, sacrificio, lucha, entrega, solidaridad, también buen fútbol... Sí, condiciones que se le deberían presuponer desde el inicio de la Liga, pero que lamentablemente no ha sido así, hasta el punto de que durante muchos encuentro la dio una sensación de desidia realmente preocupante.

La pregunta es, parafraseando a Mourinho, ¿por qué? ¿Por qué este partidazo delante de Messi y compañía? ¿Por qué no acercarse a este nivel en el resto de la temporada? Porque de haber sido así, hoy no hablaría de que la Real suma tres puntos que certifican la salvación, sino con los que podría pelear por Europa, el verdadero sitio de este equipo. Como quedó claro ante el Barça. Compro esta Real, sí; con Rulli en plan Benji 'paralotodo', con Zurutuza con nivel de selección (la que sea), y con Mikel Oyarzabal en plan estrella del futuro donostiarra. ¡Viva la madre que te parió 'Big Foot' (usa un 47 de pie el jugador eibarrés)!

Lo cierto es que la Real Sociedad ha completado un buen partido contra el Barcelona, y se puede decir que la victoria es más mérito txuri-urdin que demérito del Barça. Porque ya había avisado Eusebio en la previa: "Nosotros tenemos que provocar el mal día del Barça". Y eso es lo que han hecho. Cimentados en un gran esfuerzo defensivo, muy solidario todo el equipo, y espoleados por el golazo de cabeza de Oyarzabal nada más arrancar el partido, la Real le hizo sentirse muy incómodo a los jugadores de Luis Enrique, que en la primera parte apenas dispusieron de una jugada clara de gol. En la segunda parte, se sufrió algo más, como se esperaba, pero el Barça se topó con un Rulli inmenso y con una tela de araña defensiva que resultó inexpugnable. La Real tiró de los aciertos del Sánchez Pizjuan, los repitió y el resultado fue grande. Parece que Eusebio ha encontrado el camino a seguir... que no lo suelte, que tiene buena pinta.