Contra la precarización social y laboral

Bilbao

La manifestación ha transcurrido en dos tantas, primero UGT y Comisiones Obreras han arrancado en Gran Vía 77, y poco después ELA, después de un mitin de su secretario general, Adolfo Txiki Muñoz, han comenzado en la plaza Sagrado Corazón.

Antes de entrar en materia laboral y propia del 1 de mayo, los sindicatos han querido denunciar la actitud de las instituciones con los refugiados, afirmando que “el acuerdo entre la Unión Europe y Turquía es inhumano e inmoral”. Una queja que se ha plasmado en forma de valla, que abría paso a la marcha de UGT y CCOO.

Unai Sordo, secretario general de Comisiones Obreras en Euskadi, ha señalado a las patronales y a las empresas, junto con los distintos gobiernos (vasco y español), como responsables de la precarización social y del empleo.

A las reivindicaciones de Sordo se ha unido el secretario general de UGT en Euskadi, Raúl Arza, que ha pedido al Gobierno vasco que se implique en la defensa de la industria y de las empresas con problemas en Euskadi. Además, han insistido en la “necesidad de revertir la reforma laboral”, ya que ataca al trabajador. De igual manera, han remarcado que hay que “impulsar políticas sociales y de empleo mejores”, incidiendo en la democratización de la toma de decisión de las medidas, exigiendo que los representantes de los trabajadores sean partícipes.

Desde ELA, Adolfo Txiki Muñoz ha lanzado una “acusación muy dura” contra la patronal Confebask y el Gobierno de Urkullu. Dice que “comparten el modelo de sociedad injusto” que se está aplicando, y se ha dirigido al Lehendakari al explicar que “si los gobiernos no les dieran (a las patronales) todo el apoyo que les están dando, la patronal se vería obligada a buscar otro equilibrio”. Desde el sindicato vasco, además, han reprochado a Urkullu que no quiera reunirse con ellos, mientras que su homóloga navarra “ya está buscando fecha”.

Mirando a las elecciones, Raúl Arza no ha dudado en señalar que se trata de otra oportunidad para “cambiar las cosas” y “sacar del poder a un gobierno que no ha dejado títere con cabeza”.