Una salida amistosa

León

Sin hacer ruido, por la calle del medio y con elegancia. Juan Ferrando quiso pasar de puntillas en su adiós a la Cultural, a la que solo pudo dirigir una temporada. Cuestión de tiempo, considera, al cerrar un ejercicio que se llenó de luces en otoño y de sombras en el nuevo año.

"Mejor como amantes que como matrimonio". Así define su relación con Felipe Llamazares, uno de los focos de atención durante toda la campaña. Sobre el mal ambiente en el vestuario, Ferrando sentencia que "cuando cambias un objetivo global por uno más amibicioso, también surgen los objetivos individuales".

No hay reproches: "¿Atendió el club sus peticiones de fichajes?. Entiendo que lo intentaban. ¿Tenía a su disposición los jugadores adecuados para su idea de fútbol?. Tenía jugadores predispuestos a ello". Se va sin el necesario "feeling" con un plantel que, en buena medida. le dio la espalda, pero con el calor de un amplio sector de la hinchada que no entendió su marcha.

"¿Volverías a la Cultural?. Sí", responde sin pestañear.