Red Hot Chili Peppers, cómo hemos cambiado
Tras más de 30 años de carrera, estos clásicos del rock regresan ahora con un nuevo trabajo algo más calmado
Fuenlabrada
Los Red Hot Chili Peppers necesitan pocas presentaciones. Grandes exponentes del funky-rock, acaban de publicar ‘The getaway’, un nuevo álbum que se presenta con el single que escuchamos, ‘Dark necessities’, y que conserva la esencia y el ritmo de los californianos, aunque han bajado mucho sus revoluciones. Comparen con sus inicios, en 1984 nada menos.
Red Hot Chili Peppers, cómo hemos cambiado
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Su primer disco suponía una coctelera imprecisa entre funky, rock y punk que estaba sobrerrevolucionada. Especialmente en este single, ‘True men don’t kill coyotes’. Estos chicos eran un exceso en muchos sentidos (recordemos que tocaban vestidos solo con un calcetín en sus genitales) y eso, unido a sus carencias creativas, hacía que no pasasen de la escena local.
Los años siguientes fueron muy oscuros: dos discos insulsos, adicciones graves y la muerte del guitarrista Slovak llevaron al abismo al grupo. Pero en 1989 publicaban su cuarto disco con temas como esta versión del ‘Higher ground’ de Stevie Wonder, con el que entraban en las listas. El disco, ‘Mother’s milk’, renunciaba en parte al funky para explorar el heavy. Y coquetearon con el pop en ‘Show me your soul’, de la banda sonora de Pretty Woman.
Era lo que necesitaban para obtener el reconocimiento internacional, pero aún debían demostrar su papel en la historia. Lo consiguieron en 1991 con el disco ‘Blood Sex Sugar Magik’, un clásico del rock, donde las melodías se hicieron mucho más presentes y técnicamente más pulidas en sus primeros éxitos: ‘Give it away’ y la sorprendentemente calmada y profunda ‘Under the bridge’.
Visto que esa bajada de revoluciones le había venido muy bien al grupo, el funky y el punk fueron desapareciendo de la discografía de los Red Hot Chili Peppers. Pero hubo que esperar hasta el 95 para contar con un nuevo álbum de estudio, ‘One hot minute’, que no alcanzaba a su predecesor pero que se escuchaba muy cuidado con temas como ‘My friends’.
Este disco no tuvo la acogida esperada y el fantasma de la droga hizo que el grupo, otra vez, se asomase al precipicio. Afortunadamente consiguieron redirigirse para publicar en el 99 ‘Californication’, su disco más exitoso y el que definiría desde entonces su sonido, con introducciones suaves pero rítmicas y estribillos memorables. ‘Californication’ y ‘Otherside’ fueron sus grandes bazas.
Ahora sí que habían encontrado su camino al éxito y desde entonces han mantenido, si bien no su formación al completo, sí el espíritu de sus canciones. De hecho en el 2002 repetían la fórmula en el disco ‘By the way’, otra buena colección de temas tarareables que alcanzaron la cima de las listas.
Asistimos ahora a la época más estable de los Red Hot Chili Peppers, que con su siguiente álbum, de 2006, completan una de esas tríadas discográficas que todo gran grupo debe tener. ‘Stadium Arcadium’ tenía por título, y seguía esa línea melódica y menos furiosa con singles como ‘Dani California’, cuyo vídeo parodia la evolución de la música rock desde Elvis hasta Nirvana.
Pero el éxito, aunque fue muy estable durante la última década, volvió a perjudicar al grupo, que decidió tomarse varios años sabáticos. Entre medias, el guitarrista Frusciante dejó la banda, lo que les ha hecho perder enteros en sus temas, especialmente en los inicios tan bien tejidos por el músico. Así que costó parir algo nuevo, pero lo hicieron en 2011 con el disco ‘I’m with you’, con cuyo single nos despedimos: ‘The adventures of Rain Dance Maggie’.