La cercanía de un acuerdo precipitó la decisión de la Diputación sobre Chillida

Hondarribia

El diputado general de Gipuzkoa, Markel Olano, ha asegurado hoy que adoptó la decisión de no participar en la compra del museo Chillida Leku la semana pasada cuando constató que "existía la posibilidad cierta de cerrar un acuerdo".

Olano ha justificado su decisión sobre el museo que reúne la obra de Eduardo Chillida en declaraciones a los periodistas tras participar hoy en Hondarribia (Gipuzkoa) en el acto de inauguración de los nuevos vuelos que unen el aeropuerto de esta localidad con Londres.

El diputado general ha admitido que esta decisión no fue sometida a debate en el seno del Consejo de Gobierno Foral y que ha generado "discrepancias" con su socio de gobierno, el PSE-EE, partido que además dirige la cartera de Cultura.

Ha respondido a una cuestión planteada el viernes por su propio diputado de Cultura, Denis Itxaso (PSE), sobre por qué no rechazó participar en la posible adquisición de Chillida Leku hace un año, cuando se conoció que la parte que correspondería a la institución foral ascendía a 50 millones y, sin embargo, se ha descolgado ahora cuando la negociación estaba a punto de fructificar.

Precisamente esta circunstancia -el inminente éxito de la negociación- ha sido el detonante de la decisión, ha indicado Olano, quien ha sostenido que durante todos los meses anteriores, mientras no había acuerdo, no era el momento de decidir.

"Uno no puede asumir un compromiso cuando no estaba el acuerdo cerrado, precisamente cuando hemos visto que existía la posibilidad cierta de cerrar ese acuerdo hemos tomado la decisión", ha dicho.

También ha apuntado a que Euskadi entra en un "periodo preelectoral" que ha planteado "una encrucijada en la que la Diputación tenía que tomar una decisión".

El argumento que ha llevado a Olano a desmarcarse del proyecto para reabrir Chillida Leku en manos públicas es que los 50 millones de euros -en 20 años, como ha reconocido hoy el diputado general- "introduce una presión muy importante al presupuesto foral".

Según ha dicho, "tomar decisiones que condicionan el presupuesto y afectan negativamente a las apuestas" de la Diputación, fundamentalmente la promoción económica y la política social, "es una frivolidad".

"No podemos caer en el café para todos, en política es uno de los errores fundamentales, asumir demasiados compromisos y luego no poder cumplirlos", ha abundado.

Ha señalado que ha querido "ser honesto y consecuente" con la prioridades establecidas por el gobierno foral, ya que "vienen tiempos complicados" debido a la evolución de la demografía y "a las crecientes necesidades sociales".

Respecto al desmarque de su diputado de Cultura, Olano ha asegurado que Chillida Leku "no es una cuestión que toca el núcleo del acuerdo de coalición" entre el PNV y el PSE, por lo que ha restado importancia al hecho de no haber "logrado un consenso dentro del gobierno foral".

"No tenemos la misma visión, pero es cierto que tenemos los instrumentos para coordinarnos y para acordar las cuestiones, y en la medida de lo posible gestionar estas discrepancias", ha zanjado.

El diputado general ha añadido que la decisión sobre Chillida Leku atañe al ámbito del Departamento de Cultura, que se opone a la decisión, pero también "al resto de departamentos", ya que se trata de una cantidad económica que "condiciona y presiona al presupuesto foral en su integridad".

"Por eso yo, como diputado general, he tenido que tomar unas decisiones que consideraba que eran importantes para la institución", ha añadido.

Por su parte, el diputado de Cultura, Denis Itxaso, ha asegurado que tiene que ser Olano el que dé explicaciones tanto a la ciudadanía, como al resto de diputados y al Gobierno vasco. Itxaso además ha destacado que esta tarde iba a mantener una reunión con el diputado general para abordar lo sucedido.