Soria se prepara para la celebración de Todos los Santos

Soria

Soria cumple con la tradición estas dos noches con la celebración de la noche de Todos los Santos y la de Difuntos. Ensalzando la obras de Gustavo Adolfo Bécquer, este martes la capital acogerá una nueva jornada estelar dentro del Festival de las Ánimas, con la lectura de la ‘Leyenda de las Ánimas’, precedida por el desfile desde el Rincón de Bécquer hasta el río. El yacimiento de Numancia en Garray acoge el Samain, recuperando la tradición celta de homenajear a los muertos. Y Cuevas de Soria aúna una procesión con antorchas y la lectura de la Leyenda junto con un particular paso del fuego. Tres versiones diferentes de una misma celebración.

La Asociación de Amigos de las Ánimas lleva celebrando su Festival de las Ánimas desde el pasado 24 de octubre, con el inicio de las lecturas de relatos de terror en las ruinas de San Nicolás, donde José Ángel Mayor, Lucas Caraba, Susana Gómez Redondo o Jesús Bárez han puesto voz a las sobrecogedoras historias salidas del imaginario de Howard Phillips Lovecraft, Edgar Allan Poe y Horacio Quiroga, entre otros. El plato fuerte será en la noche de este martes, Noche de Difuntos, con la procesión y la lectura de las ánimas. Se parte de la reunión en la plaza ‘Rincón de Bécquer’, donde hidalgos y templarios recrean la batalla reflejada en la obra de Bécquer. Desde allí, se inicia el paseo nocturno por el centro de la ciudad, una procesión en dirección al río Duero, donde, junto al puente de piedra (en el aparcamiento), donde esperan una pira encendida de roble y carrasca y la lectura de la Leyenda de las Ánimas, este año a cargo del actor y director y actor de doblaje Miguel Ángel Jenner.

El yacimiento de Numancia, por su parte, acoge esta noche de todos los santos el Samain, organizado por la Asociación TierraQuemada. La noche de Samain simboliza el tránsito del mundo de la luz, al mundo de la oscuridad. Del mundo de los vivos al mundo de los muertos. Los pueblos que han venido a agruparse con el sobrenombre de “Celtas” celebraban el final de la cosecha con una gran fiesta denominada Samain, cuya etimología gaélica significa “final del verano”. Simbólicamente, la fiesta representaba la eternidad. En ella, el tiempo quedaba abolido y el mundo de los dioses, de los héroes y de los difuntos, se abría al mundo de los vivos. Este año, el homenaje es a la figura del guerrero numantino Megara. En las celebraciones desempeñaban un importante papel los expertos en artes mágicas, la suerte que traería el año nuevo estaba en las prácticas adivinatorias de los celebrantes (llamados otros pueblos Celtas Druidas). Para celebrar su vuelta se celebraba una gran fiesta, bajo la enigmática luz de la luna llena, ante sus dioses.

Y por último, en Cuevas de Soria una procesión con antorchas, la lectura de la Leyenda del Monte de las Ánimas y un paso del fuego, completan un programa que desde hace años congrega a cientos de espectadores en torno a una cita que aúna misticismo, literatura y naturaleza.