AVA rompe con la Unió de Llauradors
La Ley de la Huerta que impulsa la conselleria de vertebración del territorio ha puesto la puntilla a las tensas relaciones entre ambas asociaciones agrarias y AVA reclama al president que medie y escuche sus aportaciones
Valencia
2017, el año del cuadragésimo aniversario de AVA, ha sido pésimo para el campo valenciano. La sequía, las crisis de precios y la xylella tienen la culpa. Y también la Generalitat, según Cristóbal Aguado, y una ley de la huerta que no sirve y que convierte el campo valenciano en una postal intocable. Ya lo manifestó AVA el día de la aprobación del texto en les Corts, pero en el balance anual Aguado ha sido aún más contundente. Es una ley que no sirve. Impulsada por un departamento (la conselleria de vertebración del territorio) que es ajeno al campo.
No entiende que la conselleria de agricultura no se haya quejado e insiste: se convierte la huerta en algo turístico, que no se puede tocar. Un campo del que no se puede vivir y que no contribuirá ni de lejos a rejuvenecer la edad media de los agricultores (un tema muy preocupante para AVA) ni a revitalizar un sector, el agrario, del que hoy por hoy no se puede vivir. Por eso Aguado reclama al president que medie. Y que retire una ley en la que la Generalitat ha oído a todos pero no ha escuchado a nadie.
Cristóbal Aguado (AVA): "El campo no es una reserva india"
00:22
Compartir
El código iframe se ha copiado en el portapapeles
<iframe src="https://cadenaser.com/embed/audio/460/004RD010000000313023/" width="100%" height="360" frameborder="0" allowfullscreen></iframe>
Reclama Aguado estímulos, facilidades, precio justo... y no experimentos que no favorecen a nadie. Y señala con el dedo a la Unió de Llauradors por plegarse a los intereses de la conselleria dando la espalda a los agricultores que podrán ser expropiados si no mantienen y cultivan tierras que no pueden mantener ni cultivar porque no son rentables. Niega AVA hablar al dictado del PP y pide que se consulten los presupuestos de Generalitat, diputaciones y ayuntamientos para ver si el estómago agradecido en la Unió de Ramón Mampel con quien Aguado no tiene feeling, él prefería al fallecido Joan Brusca.
Cristóbal Aguado (AVA): "No es AVA el estómago agradecido, pregunte a la Unió de Llauradors"
00:22
Compartir
El código iframe se ha copiado en el portapapeles
<iframe src="https://cadenaser.com/embed/audio/460/004RD010000000313024/" width="100%" height="360" frameborder="0" allowfullscreen></iframe>
Aguado confía en un giro de cara a las elecciones, de lo contrario cree que la Generalitat se estará disparando en el pie como ha hecho en otras cuestiones como con su negativa ciega a la quema de la paja del arroz.
Del balance en sí
Por lo que al balance estricto se refiere, AVA pide un plan de mejora de regadíos para intentar paliar algo más una sequía que cumple cinco años; pide también que las indemnizaciones a los afectados por la Xylella sean más rápidas. Acusa a la Generalitat de haberse dormido; lamenta que la valenciana sea una comunidad en la que se siguen abandonando tierras de cultivo mientras que en el resto de España esa tendencia se ha frenado. Y culpa de ello a leyes inadecuadas y al escaso impulso del Instituto Valenciano de Investigaciones Agrarias (IVIA) que define como diamante en bruto que la administración no sabe pulir; reclama una ley de estructuras agrarias y otra de la cadena alimentaria; ve con recelo la PAC, la política agraria común que vuelve a olvidar al campo mediterráneo en la reforma que prepara; acusa a la Unión Europea de haber roto con Rusia sin buscar alternativas para ese gran mercado; tacha de lamentable el año en materia de robos en el campo y reclama que se evite el pago al contado hasta no tener garantizada la procedencia de los productos.
En cuanto a las producciones agrícolas: los cítricos cierran el año en pérdidas; la uva de vino mejora su precio por la drástica reducción de la cosecha; y en hortalizas la de 2017 ha sido la peor campaña de los últimos años; el arroz sigue vendiéndose un 40% por debajo de su precio de producción y sobrevive gracias a las ayudas; el caqui también ha frenado su crecimiento y ha sufrido pérdidas por la falta de una Interprofesional que regule la campaña.
En positivo acabó 2017 para la granada, el aguacate y el kiwi. También el olivar y la agricultura ecológica salvan el año con una rentabilidad aceptable.
En ganadería el porcino salva los muebles gracias al mercado chino. También la avicultura por el aumento de la demanda de huevos. El vacuno aguanta. La cunicultura, sin embargo, sigue en picado.
Juan Magraner
Editor 'Hoy por Hoy Matinal Comunitat Valenciana' y director del programa agroalimentario de 'La Llavor'....