Salvar una vida está en tus manos

San Sebastián

Se estima que aproximadamente el 80% de las paradas cardiacas extrahospitalarias se producen en los domicilios, en la calle,por lo que la atención de los testigos para una inmediata reanimación cardiopulmonar es fundamental. Por cada minuto que pasa si no hacemos nada la posibilidad de supervivencia disminuye un 10%.

De como poder salvar una vida, de nociones básicas y vitales  sobre reanimación cardiopulmonar y de como se debe utilizar un desfibrilador, se hablará en la charla que el Colegio Oficial de Enfermería de Gipuzkoa ha organizado para hoy jueves a las seis de la tarde en la sede del colegio y en la que participarán Asier Zamakola,enfermero de Emergentziak Osakidetza

Ambos sanitarios tienen claro que con una reanimación cardiopulmonar precoz se podrían evitar un 40% de las muertes inesperadas. “Además, en las últimas recomendaciones de las organizaciones internacionales, se dice también que cuando la parada cardiaca es susceptible de ser tratada con una descarga eléctrica, si ésta se administra en los 3-5 primeros minutos, la supervivencia puede llegar a un 50-70%. Por tanto, estamos hablando de salvar vidas”, subrayan.

Daniel Alonso, enfermero Responsable del Grupo de Paradas de Emergentziak Osakidetza explica que “la muerte súbita se produce por alteraciones del sistema eléctrico del corazón, generalmente por una arritmia maligna que se llama fibrilación ventricular cuyo único tratamiento efectivo es una descarga eléctrica que será más efectiva cuanto menos tiempo transcurra entre que se origina y se aplica el choque eléctrico”.

Según informa, si somos testigos de una parada cardiaca debemos preguntarnos dos cosas: “¿está consciente? Para lo cual tenemos que acercarnos a la victima e intentar estimularle para ver si tiene algún tipo de respuesta a esos estímulos. Si no responde –explica-, lo siguiente que nos tenemos que preguntar es: ¿respira normalmente? Para ello hay que realizar la maniobra de apertura de vía aérea para abrir la vía respiratoria y en esta posición comprobar si respira normalmente. Los ruidos anormales o una respiración excesivamente lenta no se puede considerar una respiración normal”.

Si nos encontramos ante una situación de estas, añade, “debemos activar el sistema de emergencias para que se envíe un recurso lo antes posible, llamando al número de emergencias 112 y comenzar inmediatamente a realizar compresiones torácicas”.

Asier Zamakola incide en la importancia de que el primer testigo realice maniobras de RCP de cara a la supervivencia de la persona que está parada. “Salvar vidas está en nuestras manos. Para ello, es importante que la formación llegue a todos los rincones, incluyendo en ésta, más si cabe, a esos pueblos/barrios pequeños que no tienen ambulancias cerca y en los cuales la primera asistencia profesional tarda mucho tiempo en acudir. De hecho, en Gipuzkoa se realizaron unos talleres en pueblos pequeños para formar a la población de estos lugares alejados de la asistencia profesional y medir su predisposición a hacer la reanimación cardiopulmonar. Cuando fuimos la primera vez la gente comentaba que tenía miedo a hacer las maniobras básicas, en su mayoría por falta de formación. Después de realizar un taller de cuatro horas, cambiaba totalmente esta disposición, con lo que creemos haber conseguido más testigos que iniciarán las maniobras de RCP si se encuentran ante esta situación”, añade.

En la charla  ambos ponentes hablarán sobre qué es la muerte súbita, por qué se produce y la importancia del tiempo a la hora de actuar. Asimismo, explicarán los pasos para detectar una parada cardiaca y cómo se deben hacer las compresiones torácicas, además de qué es un desfibrilador y cuándo y cómo se utiliza. De hecho, contarán con dos desfibriladores “para que el público asistente vea y toque los aparatos y practique las compresiones y la desfibrilación con muñecos”.

App “Ayuda a la parada cardiaca”

La Comunidad Autónoma Vasca cuenta con una app para teléfonos móviles que se puede descargar de manera gratuita a través de las búsquedas “Ayuda a la parada cardiaca” o “PCEH”. Cuenta con un apartado de formación para aprender cómo se detecta una parada cardiaca y cómo se realiza una reanimación cardiopulmonar y la desfibrilación. “Son fichas sencillas y gráficas para que sean accesibles a todo el mundo. Además, tiene una parte práctica que es la que te guía y ayuda a realizar la reanimación cardiopulmonar y permite localizar los desfibriladores cercanos para, en el caso de que mientras una persona realiza las compresiones torácicas otra pueda ir a buscarlo, y en cuanto lo acerquen lo utilicen si no han llegado los recursos sanitarios”, explica Daniel Alonso.