El PP denuncia el retraso en la implantación del control de acceso rodado a Dalt Vila

Ibiza

El grupo del Partido Popular en el Ayuntamiento de Ibiza pide que los servicios jurídicos y de contratación municipales determinen si ha existido "incumplimiento contractual resolutorio" por parte de la empresa adjudicataria por el retraso en la implantación de un sistema de control de accesos al tráfico rodado en los barrios de Dalt Vila y la Marina.

Los 'populares' han reclamado a PSOE y Guanyem la puesta en marcha con "carácter de urgencia" de medidas para la regulación del acceso al tráfico rodado en estos barrios que garanticen a los residentes "el acceso a sus domicilios y el estacionamiento en sus calles".

Los concejales del PP han denunciado que el sistema no se ha implantado en las fechas acordadas y que todas las tarjetas de estacionamiento autorizado de los residentes de Dalt Vila caducaron hace dos meses sin que hayan sido renovadas por el Ayuntamiento "a la espera de un sistema que no acaba de llegar".

Según han recordado, el pasado 7 de julio el Ayuntamiento formalizó un contrato con Aceinsa Movilidad S.A. por un importe de 260.117,77 euros, impuestos incluidos, para la implantación, gestión y mantenimiento del sistema. De acuerdo con el pliego de prescripciones técnicas, el método a emplear para cada control de accesos será un sistema de autorización de paso de vehículos mediante lectura e identificación de matrícula y habrá dos controles de acceso a las zonas restringidas.

Una vez formalizado el contrato, la empresa adjudicataria tenía que elaborar el proyecto de ejecución de obra y de instalación de baja tensión con un plazo máximo de entrega de 30 días naturales. Según el PP, se fijaba un periodo de implantación del sistema de hasta seis meses a contar desde del día siguiente a la fecha de la formalización del contrato, durante los cuales tenía que quedar resuelto la presentación del proyecto, aprobación, ejecución de obra civil y alta de contadores. El acta de inicio se firmaría con un plazo máximo de 15 días desde la terminación del periodo de implantación del sistema.

Según los 'populares', el periodo para instalar el sistema finalizó el pasado enero y el acta de inicio tendría que haberse firmado ese mismo mes. Los concejales han destacado que "a poco más de un mes de Semana Santa y, por lo tanto, a 30 días del inicio de la temporada turística alta, nos encontramos sin un sistema de control que regule los accesos al tráfico rodado al barrio de Dalt Vila y ante unos vecinos que manejan desde hace dos meses autorizaciones de estacionamiento caducadas y que desconocen como se regulará el acceso a sus domicilios".

Dalt Vila es zona Acire -de aparcamiento regulado y controlado- desde hace años y únicamente pueden estacionar en esta zona histórica los residentes que tienen tarjeta de aparcamiento. Los vecinos empadronados en las calles de este barrio disponían de dos tarjetas por vivienda más una tercera adicional en el caso de existir un miembro de la familia con vehículo adaptado por discapacidad reconocida. Todas ellas caducaron a comienzos de este año.