El Gobierno concede a Grisolía la Gran Cruz de la Orden de Isabel la Católica
Santiago Grisolía, de 95 años ha recibido numerosos premios y condecoraciones por su labor investigadora y por la promoción de la investigación científica
Valencia
El Consejo de Ministros ha decidido este viernes reconocer con la Gran Cruz de la Orden de Isabel la Católica al científico valenciano Santiago Grisolía, actualmente presidente del Consell Valencià de Cultura (CVC).
Médico, bioquímico y experto en varios campos de la genética, Grisolía fue reconocido con el Premio Príncipe de Asturias de Investigación Científica y Técnica en 1990, y el rey Juan Carlos I le concedió el título de marqués en mayo de 2014.
Trabajó entre 1945 y 1946 en el Departamento de Bioquímica y Farmacología de la Universidad de Nueva York, que dirigía el profesor Severo Ochoa, y posteriormente en las universidades de Chicago, Wisconsin o Kansas. En 1977 regresó a España para hacerse cargo de la dirección del Instituto de Investigaciones Citológicas de Valencia, puesto para el que había sido nombrado el 30 de diciembre de 1976 y que ejerció hasta 1992.
Su trabajo se ha centrado en materias como la enzimología del metabolismo del nitrógeno (ciclo de la urea y degradación de pirimidinas), el metabolismo de fosfogliceratos, el recambio y degradación intracelular de proteínas y el control de la síntesis de la tubulina en el cerebro. También ha dirigido la Fundación Valenciana de Estudios Avanzados y la Fundación Premios Rey Jaime I, que él promovió.
Por su labor investigadora, Grisolía ha sido seleccionado en diferentes ocasiones como candidato al premio Nobel de Química y ha recibido numerosas distinciones, entre ellas la Cruz de Alfonso X el Sabio (1969), Gran Cruz al Mérito Agrícola, Gran Cruz de la Orden Civil de Sanidad, Gran Cruz al Mérito Civil o la Medalla de Oro al Mérito en la Investigación y en la Educación Universitaria (2010).
La función actual de la Real Orden de Isabel la Católica es "premiar aquellos comportamientos extraordinarios de carácter civil, realizados por personas españolas y extranjeras, que redunden en beneficio de la Nación o que contribuyan, de modo relevante, a favorecer las relaciones de amistad y cooperación de la Nación Española con el resto de la Comunidad Internacional".