Kringe no contesta y Baldó alega que firmó una sola factura investigada

Alicante

Ana Kringe y Miguel Juan Baldó, gestores del Patronato de Turismo Costa Blanca en los años 2007 y 2008, en la etapa del popular José Joaquín Ripoll en la Diputación, han comparecido este viernes ante el juez.

Los dos están investigados, a raíz de una denuncia que Compromís interpuso ante la Fiscalía Anticorrupción hace poco más de un año, por el supuesto fraude de 3,2 millones de euros en adjudicaciones realizadas para la Feria FITUR entre los años 2004 y 2008.

Kringe ha rechazado responder a las preguntas sobre su gestión en 2007 como directora económica administrativa. Baldó, como gerente, se ha excusado en que él fue contratado en noviembre de 2008, al final del período investigado, y que no tuvo nada que ver con la aprobación de los contratos a estas empresas.

Kringe, también exalcaldesa del PP de Denia, la que más tiempo ha pasado en la sala, no ha querido responder a ninguna pregunta de la juez, alegando que no constaban los expedientes de las contrataciones de esos dos años. Ella avaló con su firma varios contratos con las empresas investigadas durante el año que ocupó su puesto. A la salida de los juzgados se ha limitado a decir que hablará "cuando pase todo" y su abogado, a confirmar que no había respondido a las preguntas formuladas.

Baldó, por su parte, ha asegurado que lo único que firmó fue una sola factura por valor de 120.000 euros en la feria FITUR; una "cuestión de trámite", ha dicho su abogado, por "una adjudicación que ya estaba realizada" cuando Baldó llegó.

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Por su parte, los dos empresarios también investigados, el matrimonio de Javier Molinos y Mercedes Lasa, responsables respectivos de las mercantiles Equipamientos Integrales de Stand Molinos SL y Exporigging, las dos radicadas en el País Vasco y beneficiadas con esas adjudicaciones, han alegado que todo se verificaba por los técnicos y que ellos sí tenían experiencia en el sector.

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Son adjudicaciones, recordamos, que se hicieron sin licitación, por contratos aparentemente fraccionados, por urgencia y sin motivar en todos los casos, y a las que se presentaban únicamente estas dos empresas, bien juntas o bien separadas, en manos de este matrimonio.

Son las mismas mercantiles, además involucradas en el caso FITUR Orihuela, actualmente pendiente de juicio. Y todo, bajo el mandato de José Joaquín Ripoll, con Sebastián Fernández como diputado de Turismo y con Kringe y Baldó, ahora asesor externo en el Ayuntamiento de La Nucía, gobernado por el vicepresidente Bernabé Cano, como gerentes.

Compromís, que ya ha avanzado que pedirá más diligencias, insiste en que es "una trama paralela a la Gürtel", y en la que están salpicados numerosos ayuntamientos de la provincia, entonces gobernados por el PP, que se habrían sumado a esta presunta red de adjudicaciones fraudulentas.