Un desastre demográfico

Salamanca

Los datos conocidos este lunes por parte del Instituto Nacional de Estadística (INE), referentes a la despoblación, advierten de la difícil situación que vive la provincia de Salamanca en los últimos años.

La región salmantina vuelve a perder habitantes y en el pasado 2017 ha marcado récord negativo de habitantes. Desde el año 1971, momento en el que el INE comienza a aportar datos sobre demografía, Salamanca no ha presentado un nivel tan bajo de población.

A fecha 1 de enero de 2018, la provincia suma 333.714 habitantes, y contribuye a hacer de Castilla y León la comunidad autónoma que más población ha perdido a lo largo del año 2017. No se frena la sangría de habitantes en Salamanca, y eso se demuestra con el preocupante dato que indica que la provincia charra pierde población sin cesar desde el año 2009, cuando sí se produjo un leve repunte de número de habitantes sobre el 2008.

A 1 de enero de 2009, la provincia tenía casi 20.000 habitantes más de los que posee nueve años después. De media, en este último período histórico, Salamanca ha perdido en torno a 2.200 habitantes al año, lo que supone para la economía local y provincial una rémora de difícil solución.

Precisamente fue en 1971 cuando, según los datos, Salamanca tenía más habitantes. En total, 380.134 personas. A partir de entonces, y hasta 1982, se produjo un declive demográfico en la zona. Tres años de estabilización poblacional, hasta 1985, dieron paso a la caída cuesta abajo y sin frenos, hasta los años 2000. El siglo se inició en Salamanca con 347.751, unos 14.000 más que la actualidad.

El desastre demográfico se acentúa en Salamanca, y parece que lo hace sin remedio.