La tasa de mortalidad por el alzheimer se dispara en Euskadi

Bilbao

El 29,4% de las defunciones ocurridas en 2017, 6.351 muertes, se debió a tumores; a continuación se situaron las enfermedades del aparato circulatorio con un 26,6% (5.756 defunciones), seguidas, en tercer lugar, a mayor distancia, por las enfermedades respiratorias, que supusieron el 10,8% (2.341) y, a continuación, por las del sistema nervioso, con un 6,6% (1.423).

La prevalencia de estos cuatro grupos de enfermedades más importantes ha ido variando en la última década: mientras que las muertes por enfermedades cardiovasculares han crecido sólo un 0,8%, los tumores lo han hecho en un 9,3%, las respiratorias un 26,3% y las del sistema nervioso un 45,8%, destacando el Alzheimer, que provocó 571 defunciones.

El motivo de las defunciones continúa siendo distinto según el sexo, ya que entre los hombres los tumores superaron a las enfermedades del aparato circulatorio, mientras que entre las mujeres la principal causa fueron las enfermedades cardiovasculares y la segunda los tumores.

Asimismo, la causa de defunción varía con la edad. En los menores de un año, las defunciones más frecuentes se debieron a enfermedades originadas en el período perinatal y a malformaciones congénitas; de 1 a 39 años las principales causas de fallecimiento fueron los tumores y las causas externas, entre ellas los accidentes y los suicidios; de 40 a 79 años fueron los tumores y a partir de los 80 años las enfermedades del sistema circulatorio.

El número de defunciones en Euskadi durante 2017 fue de 21.632, lo que supone un incremento del 1,9% respecto a 2016, según datos de Eustat. De ellos, 10.825 fallecimientos fueron de hombres y 10.807 de mujeres. Por meses, enero fue el mes en el que se produjeron más muertes (2.706) y julio en el que ocurrieron menos (1.515).

Durante el año 2017 fallecieron 345 personas con 100 o más años, entre las que las mujeres representaban el 87,2%. El número de las defunciones de personas centenarias se ha ido incrementando en los últimos años hasta alcanzar su máximo en 2017 (345 personas), superando en uno la cifra de 2015.

Por otra parte, la edad media de las personas fallecidas durante el año 2017 se situó en 80,4 años, mientras que diez años antes, en el año 2007, era de 76,8 años, por lo que se ha producido un aumento de 3,6 años en la última década.

Los hombres fallecieron de media a los 77,2 años y las mujeres a los 83,6 en el año 2017, mientras que en el año 2007 las medias habían sido, respectivamente, de 73,1 y 80,9 años. En consecuencia, durante estos últimos 10 años, los hombres han aumentado su edad media de defunción en 4,1 años y las mujeres en 2,7 años.

Del mismo modo, el crecimiento vegetativo fue negativo, ya que hubo 4.556 nacimientos menos que muertes. Por territorios, se produjeron saldos negativos en Bizkaia y Gipuzkoa, que perdieron 3.291 y 1.413 personas, respectivamente; por el contrario, en el caso de Álava, el número de defunciones fue inferior al de nacimientos, con lo que el saldo fue positivo en 148 personas.

En cuanto a la mortalidad infantil, fallecieron 41 menores de un año en Euskadi. La mortalidad neonatal, referida a los primeros 28 días de vida, contabilizó 24 defunciones, cinco de las cuales se produjeron durante las primeras 24 horas y otras 15 en la primera semana. Entre los menores de 1 año, las defunciones de niñas fueron el 39% del total.