¿Y el servicio de tren de cercanías en Granada, para cuándo?

Granada

el futuro ferroviario de la provincia de Granada. Pero no de la alta velocidad, que está por llegar, sino del futuro de las comunicaciones convencionales. La perspectiva de la reapertura de la línea Granada-Bobadilla en unos nueve meses ofrece a Granada la oportunidad de repensar el futuro de sus comunicaciones a corto plazo. Pero nadie ha comenzado aún a estudiar el asunto.

¿Funcionará la línea convencional de tren entre Granada, Loja y Bobadilla desde el mismo momento en el que comience a prestar servicio comercial el AVE? ¿Recuperaremos las conexiones regionales? ¿Será posible ampliarlas? El aislamiento ferroviario que sufre esta provincia desde hace tres años y medio ha provocado que sociedad civil, instituciones y partidos políticos se obsesionen lógicamente con la AVE.

Pero nadie ha planteado estudiar la respuesta a estas preguntas; ni cómo aprovechar mejor nuestras líneas tradicionales, ni cómo mejorar el servicio entre El Marquesado, Guadix, Los Montes y Granada. Además, Granada guarda silencio, como si el AVE lo fuese todo, sobre otro proyecto clave: el tren de cercanías entre Granada y Loja.

Según el informe que Radio Granada elaboró hace una década sobre el impacto de un servicio ferroviario de cercanías entre la capital y Loja, unas 100.000 personas se beneficiarían de un sistema perfecto. 100.000 personas, sin contar los habitantes de la capital. Ahora, con el metro en funcionamiento y con una parada intermodal entre cercanías y metro, las ventajas serían incalculables en todos los aspecto.

La Asociación de Amigos del Ferrocarril coincide en la necesidad de que Granada comience a estudiar estas soluciones. Su presidente, José Antonio Molina, dice que no solo del AVE vivirá Granada.

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La Asociación de Amigos del Ferrocarril, interpelada por esta asunto por Radio Granada, considera que la provincia debe abrir ya este debate. Dice que es imprescindible.