Ramón Mesonero Romanos

Madrid

Ramón Mesonero Romanos fue cronista de la ciudad de Madrid y hoy por desgracia es uno de los grandes olvidados de la capital. Su calle, en pleno centro de la ciudad, la misma por donde a diario entramos en la cadena SER, en Radio Madrid (realmente no estamos en Gran Vía 32, sino en la calle Mesonero Romanos, ¡os hemos estado engañando durante años!) es una de las más transitadas al unir Gran Vía con Preciados y la Puerta del Sol. Se codeó, como grande que era, con los escritores, actores o pintores más importantes del Romanticismo como Larra, Zorrilla o Espronceda.

El trabajo de Mesonero Romanos se centró en el Madrid más costumbrista. Sus paseos por la ciudad le enamoraron. Gracias a un instinto innato para observar, buscar y descubrir, fue capaz de dar con la historia de sus calles, sus edificios y los protagonistas que habían vivido en ellos. A él le debemos obras tan emblemáticas como Mis ratos perdidos o ligero bosquejo de Madrid en 1820 y 1821, Manual de Madrid. Descripción de la Corte y de la Villa, Escenas y tipos matritenses, Memorias de un setentón, natural y vecino de Madrid, Obras jocosas y satíricas de El Curioso Parlante (1832-1842), etcétera.