Los testigos trasladan la mala relación del acusado de Pioz y su tío

Toledo

Pasadas las 9.30 horas de este jueves se ha retomado el juicio contra Patrick Nogueira, autor confeso de las muertes de sus tíos y sobrinos en su vivienda de Pioz en agosto de 2016, sesión en la que está prevista la intervención de una treintena de testigos. Antes de comenzar, la abogada defensora del acusado, Bárbara Royo, ha atendido a los medios de comunicación para respaldar el testimonio vertido por Nogueira: "Ha contado las cosas tal y como son".

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Nogueira alegaba en su intervención que mató a su tía porque ella le mordió primero, que al llegar su tío se le abalanzó y comenzó un forcejeo que terminó con la víctima acuchillada en el suelo y que su alcoholismo le hacía ver "sombras".

Royo ha manifestado que en la declaración de su defendido "no ha habido ninguna contradicción" así como que todavía queda "mucha prueba" por practicar.

Según ha precisado a los periodistas a su llegada, será "todo el conjunto" lo que haga que se tome una decisión, asegurando que "no vale más un día que otro".

Ha incidido en que la vista está transcurriendo según lo previsto aludiendo a que este jueves se hará parte de la prueba testifical y mañana viernes serán los peritos los que declaren.

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Patrick llegaba a la Audiencia desde la prisión madrileña de Estremera sobre las 8.30 horas en un furgón de la Guardia Civil, vistiendo camisa blanca y jersey gris.

Varios testigos han señalado hoy la mala relación que mantenían el acusado, Patrick Nogueira, con su tío y víctima, Marcos Campos. Algunos, compañeros de trabajos del tío de Patrick Nogueira, acusado del cuádruple crimen de Pioz, han asegurado que la víctima Marcos Campos les manifestó que desconfiaba de su sobrino y sospechaba que era amante de su mujer.

Otra de las personas que trabajó con Marcos en un restaurante también ha reconocido que la víctima le había confesado alguna vez que desconfiaba de su sobrino por una posible relación con su mujer.

Pilar R., una compañera de piso de Patrick Nogueira, ha subrayado que el acusado de los crímenes estaba obsesionado con su tío, Marcos Campos, una de sus víctimas. Esta testigo ha declarado que se llevaban muy bien, salían a tomar algo y compartían las tareas de la casa sin problema alguno.

Por su parte, Walfran Campos, tío del acusado y hermano de la víctima, ha dicho que Marcos le habló mal de Patrick: "Me habló de mal comportamiento y me dijo que Patrick no era el mismo que en Brasil, que no le respetaba y obedecía, que no limpiaba y si salía por la noche volvía por la mañana", ha señalado.

También han prestado declaración el padre y la hermana de Janaina y han manifestado que eran reacios que el acusado viviera con la familia, como ocurrió durante una época a la llegada de Patrick a España, tras el incidente que había protagonizado con su profesor y que cuando se descubrieron los cuerpos, pensaron inmediatamente en él como responsable de los crímenes, por ese brote violento del pasado.

Tanto el Ministerio Fiscal como acusaciones particulares solicitan para el acusado prisión permanente revisable, mientras que la defensa pide 7 años y seis meses por cada uno de los asesinatos de los dos niños y 5 años por los homicidios de sus tíos.