La dirección de Asturias pide explicaciones a Llamazares, que dice que no pedirá perdón

Oviedo

Gaspar Llamazares se siente víctima de "una cacería al estilo de Villarejo". Así ha reaccionado el portavoz de Izquierda Unida en la Junta General tras la difusión de las grabaciones en las que se ofrece para ser candidato de Actúa, el partido de Baltasar Garzón a las próximas elecciones europeas, y elucubra con la posibilidad de llevarse los votos de los electores de la coalición bajo la nueva marca. Sobre el contenido de la grabación, Llamazares asegura que al haberse producido hace seis meses está fuera de la actualidad y que no era más que una tormenta de ideas pro la que no piensa pedir perdón.

Desde IU de Asturias, en un difícil papel de mediador, su secretario de Organización, Alejandro Suárez, ha pedido calma, responsabilidad y apoyo a IU federal. Lo primero va a ser pedirle a Llamazares que expresa su compromiso sin matices al proyecto político de la coalición, y sobre todo procurar un clima de sosiego para que no se tomen decisiones en caliente.

Los críticos no han tardado ni un minuto en pedir, ahora sin medias tintas, lo que ya venían insinuando desde hace días: la dimisión de Llamazares como portavoz parlamentario. Carmen Conde, la que se perfila como previsible rival de Llamazares en las primarias de IU de Asturias si es que éste logra mantenerse dentro de la organización, dice no tener dudas sobre su falta de lealtad al proyecto de la organización.