Calentarse o comer, ese es el dilema
Según un estudio de Cruz Roja, más de la mitad de sus usuarios se debate entre entre mantener su vivienda a una temperatura adecuada o alimentarse correctamente
Murcia
La falta de ingresos supone minimizar los gastos en alimentos -el 22% no come proteínas ni tres veces por semana-, además de reducir los gastos en medicinas, tratamientos médicos o en equipación escolar.
Las familias destinan el 40% de sus ingresos al pago de la vivienda, y la carencia de recursos tiene otras repercusiones, tanto en la salud de las familias, como en el rendimiento escolar en los hijos.
El 29,6% de los usuarios que padecen pobreza energética tienen problemas laborales por el absentismo derivado de sus enfermedades, y a un 18,5% les ha causado problemas a la hora de buscar empleo. Hablan, entre las posibles causas, de que no cuentan con las condiciones de higiene y vestimenta adecuadas para afrontar una entrevista laboral.