Evacuadas 5 viviendas amenazadas por un argayo en Los Corrales

Santander

Cinco viviendas han sido evacuadas en la mañana de este domingo, al verse amenazadas por el argayo de una ladera anexa a las edificaciones en San Mateo, localidad perteneciente al municipio de Los Corrales de Buelna.

Según la Delegación del Gobierno en Cantabria son 16 las personas que han tenido que ser evacuadas de estas cinco viviendas y que han sido realojadas en casas de familiares.

El Servicio del 112 ha explicado que la evacuación se debe a un argayo, al producirse ayer por la tarde una fractura en el terreno de unos 100 metros de alto por 30 de ancho, unos 3.000 metros cuadrados, que ha incrementado su peligro con las lluvias caídas esta madrugada.

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Efectivos de Protección Civil del municipio dieron aviso del desprendimiento a personal del 112 en la tarde del sábado.

Para valorar la situación se trasladó hasta el lugar un jefe de parque de bomberos del Servicio de Emergencias del Gobierno de Cantabria y personal del Ayuntamiento de Los Corrales de Buelna.

Una vez comprobado el alcance del argayo, se determinó poner sobre aviso a los vecinos para que estuvieran preparados ante la posibilidad de que las nuevas lluvias, previstas para la noche, agravaran la situación.

Esta mañana, tras una nueva valoración de personal técnico municipal, y ante la imposibilidad de poner medidas reparadoras provisionales, se ha decidido la evacuación de las viviendas, que ha sido materializada por agentes de la Policía Local.

Para comprobar la evolución hasta que se puedan acometer soluciones técnicas se han instalado puntales de medición para comprobar el avance del terreno.

Dadas las intensas lluvias caídas y la gran acumulación de agua que presenta la tierra, la Dirección General de Protección Civil y Emergencias el Gobierno de Cantabria y el 112 recomiendan a todas las personas que vivan en zonas cercanas a laderas que observen el terreno.

Ante cualquier desprendimiento o fractura abierta, piden que se llame al 112 para comunicar la situación y que se pueda valorar el posible riesgo de corrimiento y las medidas a adoptar para evitar daños en personas y bienes.