Un alcalde no puede hacer nada
A partir de ahora, se le puede plantear una querella criminal a un alcalde por cambiar el sentido del tráfico de una calle o por colocar un semáforo

"La línea roja" de Matías Vallés (22/02/19)
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Palma
No vamos a discutir aquí si en el Supremo se celebra un juicio político a presos políticos, porque tenemos una querella política más próxima.
Afecta al alcalde de Palma, y la acción penal de la patronal del alquiler turístico ha sido aceptada por el juzgado de Instrucción correspondiente.
Si Antoni Noguera no puede imponer limitaciones al alquiler turístico que anunció en campaña y que vienen tramitadas por los canales habituales, sin que le caiga el mazazo de una querella, la conclusión es muy clara.
Un alcalde no puede hacer nada.
Prevaricación es darle tres millones de euros a Urdangarin para organizar foros fantasma, no cumplir con el programa electoral avalado además por un clamor vecinal.
A partir de ahora, se le puede plantear una querella criminal a un alcalde por cambiar el sentido del tráfico de una calle o por colocar un semáforo.
Pensábamos que en las islas de las estafas de Lujo Casa y de la corrupción urbanística desatada, los jueces estaban para otras cosas.
Se debería llevar a los políticos a los tribunales por incumplir el programa electoral, no por aplicarlo aunque sea tímidamente.
De lo contrario no sufre la política, sufre la justicia.




