No somos de piedra

Santa Cruz de Tenerife

Como suele, lo clava Padylla con su viñeta de este domingo sobre los temas de la campaña electoral. Pone en evidencia el absurdo de que un conflicto, a fin de cuentas todavía concepto abastracto, como el de Cataluña, cope la escena hasta el punto de minimizar el resto. Un resto que incluye paro, pobreza infantil, asesinatos machistas, y un etcétera francamente espeluznante... Sin embargo, ese trágico panorama se tapa graciosamente dejando caer las banderas, a modo de telón, y todo queda olvidado...

 Olvidado, no superado, por supuesto... Porque el día 28, una vez depositado el voto, nuestros problemas seguirán siendo los mismos. Seguirá habiendo salarios ínfimos, muertas, abuelos con pensiones ridículas, las nuestras seguirán estando en veremos... Seguirá habiendo niños a los que se educa por debajo de sus capacidades, pobreza...

Y probablemente habremos votado mejor o peor, pero a ciegas...

Hemos perdido mucho el norte... Esta semana lloramos (al unísono y cómo Magdalenas) el incendio de Notre Dame... Yo la primera, conste, hechizada ante lo que estaba pasando... Pero fallamos como humanidad si lloramos por la destrucción del vidrio y la piedra las lágrimas que no nos arrancan la de la carne y la sangre...