En Balears ganan todos menos uno

Palma

En el Congreso habrá más diputados independentistas que de Vox, pero hablemos en términos regionales.

Han sido unas elecciones felices en Balears porque, de los cinco concursantes con derecho a escaño, cuatro pueden considerarse ganadores.

El PSOE sobre todo. Por primera vez en su historia de segundón de la política balear, no solo se ha puesto por delante del PP en votos, sino sobre todo en escaños.

No había ocurrido jamás, ni en unas autonómicas ni en unas generales.

Y si me lo permiten, hay más culpa del PP que mérito del PSOE, pero sigamos con el recuento.

Podemos debe estar felicísimo con sus dos escaños, fruto de una resistencia de sus votantes a prueba de bombas. En ningún otro lugar de España han mostrado una fidelidad semejante a Pablo Iglesias.

Y qué decir de Ciudadanos, coronado inesperadamente como el primer partido conservador de Balears.

Y aunque parezca de mal gusto felicitar a Vox, es una hazaña estrenarse con un diputado en las grandes ligas.

Si no nos hemos descontado, solo nos queda el PP. Ha sufrido el mayor desastre de su historia, más grave en Balears que en el conjunto de España. El cuarto, solo por encima de Vox.

Ahora ustedes quieren saber cómo influirá la jornada de ayer en las autonómicas, y les respondo que es pronto para decirlo. Una forma como otra cualquiera de escabullirse.