Para ganar hay que seguir votando
Los perdedores masivos de la derecha, porque un periodista ha de tener amigos hasta en el infierno, demandan una receta para ser rescatados del naufragio

"La línea roja" de Matías Vallés (01/05/19)
El código iframe se ha copiado en el portapapeles
Palma
Nunca he ganado unas elecciones, pero esta evidencia no impide que algún despistado me consulte sobre la mejor forma de abordarlas.
Votando, suele ser mi respuesta más célebre.
Desde el domingo, las cuestiones cargadas de incertidumbre proceden de dos bandos contrapuestos.
Los artífices voto a voto de un inesperado por abultado triunfo de la izquierda en Balears, temen que su tesoro desaparezca así que lleguen las autonómicas del cuarto domingo de mayo.
Los perdedores masivos de la derecha, porque un periodista ha de tener amigos hasta en el infierno, demandan una receta para ser rescatados del naufragio.
Me basta con ver la cara implorante a ambos bandos, para soltarles un animoso “se trata de seguir votando”.
Ignoro si me harán caso, pero sobre todo las izquierdas deberían atender a quienes recordamos los tiempos en que la derecha ganaba en todas las ocasiones, porque nunca andaba corta de votantes.
En foros más presuntuosos les recomendarán técnicas electorales con mayor sofisticación.
Sin embargo, desde aquí nos decantaremos por lo rústico. Las elecciones se ganan votando.




